México.- Es joven, simpática, bonita, amable y, además de otras virtudes, tiene un sentido del humor que no se le agota a la primera sonrisa.
Se llama Kate Hudson y es hija de una actriz a la que los amantes del cine conocen desde hace muchos años: Goldie Hawn.
Lanzada a la fama por la cinta Almost Famous, en la que fue dirigida por Cameron Crowe, Kate Hudson tardó algún tiempo en tomar la decisión de seguir la ruta marcada por su madre.
“Me producía una sensación muy contradictoria la sola idea de convertirme en artista de cine. No estaba muy segura de querer hacerlo, pero también me atraía esa posibilidad. Crecí viendo las películas de mi mamá y de algún modo quería hacer lo mismo que ella”.
Con estas palabras la estrella de 200 Cigarettes y Desert Blue, sus primeras dos películas, explicó los sentimientos e ideas que tenía en el corazón y la mente poco tiempo antes de hacer su debut en la pantalla grande.
“Yo había visto la película original, que fue hecha en los años 30, era una de las favoritas de mis padres. Siempre que tenían la oportunidad de verla por televisión trataban de que yo también lo hiciera. Fue una agradable sorpresa para mí saber que los productores y el director de Four Feathers se habían fijado en mí para que hiciera el papel de Ethne”, dice Hudson, al mismo tiempo que se acomoda en el pelo una flor hecha con cristales amarillos.
“El proceso de selección por el que tuve que pasar fue relativamente tranquilo. Cuando tuve mi primera entrevista Shekhar Shapur me pidió que leyera una sola página de mis diálogos. Después él y Stanley R. Jaffe [productor] me llamaron para que hiciera otra pequeña prueba. Siete días más tarde supe que había ganado la oportunidad de interpretar a Ethne”.
“Inmediatamente llamé a mi mamá para darle la noticia. Lo único que me dijo, con un tono de voz muy solemne, fue que no estaba realmente sorprendida porque sabía que yo iba a ganar fácilmente el papel de Ethne”.
Animada por los recuerdos que tiene de esos momentos, Kate Hudson asegura que no fue muy fácil para Goldie Hawn contener la emoción que le provocó tan agradable noticia.
“Ese mismo día ella organizó una fiesta a la que invitó a nuestros mejores amigos”, explica Hudson divertida.
“A todos les dijo, conforme fueron llegando a casa, que era el evento más importante que habíamos tenido en la familia y que estaba segura de que esta vez con Four Feathers sí podría ganar el primer Oscar de mi carrera. Fue muy agradable saber que gracias a mi trabajo podía llegar a darle tanta felicidad y alegría a mi madre”.
Impulsada por esa posibilidad, en la que también caben otras oportunidades de recibir importantes premios y reconocimientos en diferentes partes del mundo, Kate Hudson afirma que realizó una extensa investigación (por medio de libros, películas y documentales) acerca del período histórico en el que transcurre Four Feathers.
“Yo no sabía muchas cosas sobre el pasado de un país como Inglaterra”, apunta Hudson tranquilamente. “En la universidad donde estudié nunca tuve la oportunidad de entender a qué se referían los profesores cuando hablaban del ‘espíritu colonialista’ que tuvieron los ingleses durante el siglo XIX”.
Trabajar en un filme como Four Feathers le hizo también darse cuenta de lo limitada que era la información que tenía acerca de la vida y los pueblos de África. Aunque Ethne nunca sale de Londres, porque no siente la necesidad de hacerlo, a través de los ojos y la sensibilidad de ella Kate Hudson aprendió a ver el mundo de otro modo.
“Por ejemplo, ahora comprendo que existía una relación muy cercana entre los modales de la aristocracia inglesa y la actitud de superioridad que tenían hacia otras culturas”, apunta enfática.
“Uno de los datos más interesantes que encontré mientras realizaba mis investigaciones fue que entre 1875 y 1884 Inglaterra tenía conquistado el 25% de los lugares conocidos en la Tierra. Eso me dio una idea bastante clara del poder que llegaron a tener los militares ingleses fuera de su país”.