Ginebra.- Casi la mitad de las mujeres víctimas de homicidios son asesinadas por su marido o compañero, con el que conviven o del que se han separado, y además la violencia es la responsable del siete por ciento de la mortalidad femenina en el mundo en el segmento de edad de 15 a 44 años.
Con motivo del Día Internacional contra la violencia contra las mujeres, que se celebra el próximo lunes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha lanzado un llamamiento a los Gobiernos para que adopten las medidas necesarias para reducir este problema.
Además de los fallecimientos, la violencia que sufren centenares de miles de mujeres tiene como consecuencia un importante número de patologías inmediatas o a largo plazo, como traumatismos físicos, síndromes de dolores crónicos, depresión o comportamientos suicidas.
Igualmente influye en los ingresos de la mujer, en el ejercicio de su actividad profesional y en su capacidad de mantener un empleo, señala la OMS.
En algunos países, hasta el 69 por ciento de las mujeres aseguran haber sufrido agresiones físicas en algún momento de su vida y el 47 por ciento dicen que su primera relación sexual fue obligada.
"Hay que hablar de la violencia y escuchar a las víctimas. Comunicar, romper los tabúes y exponer los actos de violencia que se producen entre nosotros es la primera etapa de una acción eficaz para reducir el fenómeno en nuestras sociedades", resalta la directora general de la organización, Gro Harlem Brundtland.
Otro dato que destaca la OMS es la enorme diferencia en la incidencia de este problema, con una tasa de homicidio de mujeres de más del seis por 100.0000 en países en desarrollo frente al 0,4 en algunos desarrollados, como España. Francia, Grecia, Italia, Japón y Reino Unido.
La juventud, la debilidad de ingresos, la escolaridad deficiente, los comportamientos delincuentes en la adolescencia, el consumo abusivo de alcohol o los antecedentes de violencia masculina en la familia son algunas de las características que más se repiten entre los hombres que golpean a sus compañeras.
Las mujeres son particularmente vulnerables a las agresiones de sus compañeros o maridos en las sociedades en las que se dan desigualdades importantes de género.
La OMS señala que hay una serie de programas de prevención que pueden ayudar a mejorar la situación, como puede ser un acceso menos fácil al alcohol y a las armas, la reducción de las desigualdades y el refuerzo de la Policía y del sistema judicial.
Brundtland recordó que en el mundo, "la mayoría de las mujeres sufren aún de pobreza, discriminación y violencia".
Por ello, la organización lanzará una campaña mundial de prevención de la violencia en la que ya han anunciado su participación países como Bélgica, Brasil, Colombia, Costa Rica, Filipinas, Mozambique, Sudáfrica o Tailandia.
EFE