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San Luis Potosí, S.L.P.- El Subsecretario del Trabajo y Previsión Social, Francisco Xavier Salazar Sáenz afirmó ayer aquí que en el proyecto de reforma a la Ley Federal del Trabajo (LFT), se busca fortalecer el sindicalismo.
En entrevista, el funcionario de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STyPS) sostuvo que en la reforma a la ley laboral no se toca el derecho de huelga, que es una arma legítima para los trabajadores de México.
Indicó que en la propuesta que existe de reforma a la LFT “se impulsan mecanismos para frenar a los líderes que no se preocupan por el beneficio de los trabajadores, para ello, se pretende regular su actuación, para que rindan cuentas, para que las elecciones sindicales sean democráticas y el voto secreto”.
Sobre las negociaciones entre el Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) y Petróleos Mexicanos (Pemex), el funcionario federal señaló que existe confianza en que la empresa y el gremio lleguen a un acuerdo sobre la revisión salarial.
“Si el sindicato pide un incremento salarial del 15 por ciento, y la empresa ofrece el cinco por ciento, existe la capacidad de negociación para llegar a un punto intermedio y así establecer un acuerdo que no ponga en riesgo la operatividad de la empresa”, dijo.
Salazar Sáenz fue entrevistado en esta ciudad, de donde es oriundo, luego de revelar que declinó en su aspiración de obtener la candidatura del Partido Acción Nacional (PAN) a la gubernatura del estado y competir en las elecciones del 2003.
Expresó que se suman a la aspiración del vicecoordinador de la fracción parlamentaria del PAN en la Cámara de Diputados, Alejandro Zapata Perogordo, a quien apoyará para que sea el candidato panista a la gubernatura del estado.
Sostuvo que tomó la decisión de retirarse de la contienda interna del PAN en San Luis Potosí porque tiene una gran responsabilidad con México y su estado como principal responsable de impulsar la reforma a la Ley Federal del Trabajo en México.
Puntualizó que el Gobierno Federal no se encuentra en contra del sindicalismo y nunca ha estado en “tela de juicio” su utilidad para el trabajador, para la empresa y para la nación, “en lo que no creemos son en los sindicatos corruptos y antidemocráticos”.
Reiteró que el derecho de huelga es un beneficio laboral que seguirá inalienable para la clase trabajadora, debido a que es un instrumento válido al cual todos los sindicatos tienen derecho a usar cuando realizan las negociaciones para los incrementos salariales.
Hizo énfasis en que todos los sindicatos tienen el derecho de usar los emplazamientos a huelga para negociar los incrementos salariales, siempre y cuando sean razonables, porque, “no pueden solicitar un aumento salarial que aniquile a la empresa”.