Agencias
WASHINGTON, D.C.- Jennifer Peña cantó El Dolor de tu Presencia en presencia del presidente George W. Bush y la primera dama. En la recepción anual por el Mes de la Herencia Hispana, la juvenil cantante compartió el escenario con Jaci Velásquez y Gian Marco, ante unas 150 personas.
Carlos Ponce hizo de maestro de ceremonias. Pero quienes se lucieron como cantantes en el escenario presidencial fueron Jennifer Peña y otros dos jóvenes valores de la música latina: la texana Jaci Velásquez, con un nuevo peinado y el peruano Gian Marco. También estuvo entre el público el productor y empresario cubanoamericano Emilio Estefan.
Jenny presentó su versión del éxito escrito y producido por Rudy Pérez, El Dolor de Tu Presencia, sencillo de su álbum Libre, que ya lleva ocho semanas en el primer lugar del Billboard. La cantante se sintió "un poquito nerviosa, porque fui la primera... me sentí muy honrada de cantar para el presidente de Estados Unidos... una persona muy amable", declaró Jennifer.
Por su parte, Gian Marco fue el primer peruano en cantar en la Casa Blanca como parte de esta celebración de la Hispanidad. Allí interpretó el vals La Flor de la Canela. Mientras tanto, su sencillo Se me olvidó ocupa el primer lugar de la cartelera de éxitos en España.
Entre los altos funcionarios del gobierno federal que estuvieron allí figuraron varios hispanos, como el Director General de Salud, Richard Carmona, la Tesorera Rosario Marín, el Director del Cuerpo de Paz, Gaddi Vásquez y el Embajador de Estados Unidos en la República Dominicana, Hans Hertell.
Otra ilustre invitada a la celebración fue la flamante Miss Universo panameña, Justine Pasek, en una de sus primeras actividades públicas desde que asumió su corona. Igualmente, estuvieron en la Casa Blanca el lanzador del equipo de béisbol Los Cerveceros de Milwaukee, Nelson Figueroa y el receptor de Los Texas Rangers, Iván Rodríguez.
No faltaron las críticas
"La comunidad hispana merece más que una palmadita en la espalda y unas cuantas palabras en español masticado por el presidente Bush". Así comenzaba la crítica del presidente del Comité Nacional del Partido Demócrata de Estados Unidos, Terry McAuliffe, quien calificó de "Política de Mariachi" el enfoque del mandatario hacia los hispanos del país.
El político acusó al gobierno de "recordar repentinamente que era el Mes de la Herencia Hispana" y sostuvo que los hispanos no serán tomados por tontos a la hora de votar, ya que "conocen la diferencia entre los puros gestos republicanos y el compromiso genuino con sus intereses" que ofrecen los demócratas. McAuliffe se refirió específicamente a la política migratoria, así como a la educación y la salud.