No se confunda, los Bipolares no son que viven o han vivido hasta dos veces en el Polo Norte, los Bipolares son terrenales, bípedo implumes, que pueden habitar en cualquier clima, en cualquier país, en cualquier comunidad, pero que a veces son estigmatizados, distinguidos o etiquetados erróneamente desde mi óptica, por su desorden mental.
Anote usted como un ejemplo de Bipolar a los llamados maniático-depresivos que a veces pueden estar a su alrededor en su trabajo, escuela, industria, en su centro de estudios o en su propio hogar.
Un Bipolar, muchas veces no está seguro de lo que realmente es, está normalmente lleno de y/o saturado de estrés, desorden que puede ser hereditario.
Lo Bipolar, para que me entienda en cristiano es un estado de las personas que oscilan constantemente entre la elación y lo dispar.
Sufren de episodios psicóticos y depresivos y requieren ordinariamente de terapias, medicamentos y calibración interior, requieren de cierta vigilancia, de alimentación balanceada y de muy buen sueño.
Es muy normal que escuchen voces interiores, que afortunadamente se pueden controlar mediante una educación especial, normalmente desean ser parte del gran conglomerado social o que se le clínicamente como el mundo normal.
El tema viene a colación debido a que se sufre de carencias dentro de nuestros centros de trabajo para el conocimiento adecuado y la atención clínica adecuada en su caso de quienes sufren este tipo de trastorno involuntario en donde se requiere de la colaboración del patrón o empleado, de sus compañeros de trabajo y de los servicios médicos interiores o exteriores que las empresas tengan instituidos y no digo más.
Piense asertivamente y acertará