Nueva York, E.U.- Marisa Tomei ha desempeñado multitud de papeles desde que ganó el Oscar de reparto por su trabajo en la película My Cousin Vinny, de 1992. Sin embargo, no todos esos papeles han sido aclamados por el público.
“He tenido una carrera con altibajos, como la mayoría de mis colegas”, dijo la estrella en una entrevista reciente. “Supongo que pensé que yo sería la excepción, pero no lo soy. Tengo altibajos”.
Después de más de una docena de películas, y de algunas apariciones en teatro y televisión, la carrera de Tomei ha mostrado un ascenso con su sutil actuación como la novia de un joven asesinado en la cinta In The Bedroom. El papel le mereció una segunda postulación al Oscar, pero esta vez la actriz no obtuvo la estatuilla.
Tomei se muestra resentida con quienes todavía piensan que su primera postulación al Oscar fue un golpe de suerte, por demás inmerecido.
Esos escépticos “parecen preguntarme: ‘¿dónde has estado durante diez años?’ Parece como si yo hubiera sido un fracaso miserable por diez años y que ahora me hubiera reivindicado”, señala. “Desde luego que eso hiere mis sentimientos”.
Aunque muchos críticos consideraron que la actuación de Tomei en In the Bedroom fue la mejor de su carrera, ella responde: “No creo que la gente haya visto una décima parte de lo que puedo hacer. Todo depende de que llegue el papel adecuado. No pienso que puedo hacer todo, pero sé que puedo lograr mucho más”.
Tomei, de 37 años, muestra parte de esa versatilidad en su nuevo filme, Just a kiss, donde interpreta a la empleada psicótica de un salón de bolos, que adivina la suerte y tiene cierta inclinación sadomasoquista.
La comedia, estelarizada por Kyra Sedgwick, Taye Diggs, Ron Eldard y Marley Shelton, relata la historia de un grupo de neoyorquinos cuyas vidas quedan profundamente afectadas por la infidelidad.
El director Fisher Stevens, quien es un viejo amigo de Tomei, dice que la actriz lo sorprendió con la intensidad de su compromiso hacia el papel que representó.
“He trabajado mucho con ella y tiene simplemente una gran capacidad para meterse en su papel y para correr riesgos”, dice Stevens. “Muchos actores en nuestros días se preocupan más por el modo en que lucen, pero con ella, lo principal es el personaje: quién es y qué quiere en esta escena, no tanto cómo luce o cómo va vestido”.
Tomei, quien se crió en la zona de Flatbush, en el barrio de Brooklyn, abandonó sus estudios en la Universidad de Boston después del primer año, para actuar en varias telenovelas norteamericanas y una comedia semanal.
Su debut cinematográfico llegó en 1984, en un papel que tenía un solo parlamento, para la película The Flamingo Kid. Luego actuó como la hija de Sylvester Stallone en Oscar y después como la mecánica automotriz convertida en cosmetóloga, en My Cousin Vinny.
La obtención del Oscar asombró a Hollywood, y la carrera de Tomei despegó, con papeles en las películas Chaplin, The Paper, Only You, The Pérez Family, Four Rooms, A Brother’s Kiss, Welcome to Sarajevo, Slums of Beverly Hills, Someone Like You y The Watcher.
En ese periodo, se cansó de hacer el papel de mujeres astutas, inmigrantes o pobres. La actriz se pregunta si asignación de esos papeles, “se debe a que tengo el cabello castaño o es porque en realidad provengo de Flatbush”.
Tomei ha tratado de impulsar su carrera en otros ámbitos, subiendo al escenario como integrante del grupo teatral Naked Angels. Su debut en Broadway llegó en 1998, junto a Quentin Tarantino, en la criticada obra Wait Until Dark.
Pese a los momentos difíciles, Tomei dice que ha mantenido una dosis de buena voluntad por parte de los espectadores.
“Realmente percibo que la gente está contenta conmigo... siento esas vibraciones. Sólo que no parezco aplicar eso para obtener más oportunidades para mí”, añade suspirando.
Tomei, cuyas películas recientes incluyen: What Women Want, tiene dos proyectos más pendientes: Anger Management, con Jack Nicholson y Adam Sandler, así como The Guru, con Heather Graham.
“Cuando comencé era ingenua y pienso que entretanto he madurado. La diferencia es que ahora me conozco mejor y tomo mejores decisiones”, señala.