Reuters
LONDRES, Inglaterra.- Todo comenzó como una infección misteriosa entre los hombres homosexuales, pero en dos décadas la incidencia de SIDA ha aumentado hasta convertirse en la peor epidemia que la humanidad ha enfrentado hasta la fecha y, en la actualidad, afecta tanto a las mujeres como a los hombres.
El SIDA habrá cobrado la vida de 3.1 millones de personas en el mundo cuando finalice este año. Cinco millones más se habrán infectado con el letal VIH, el virus que causa la enfermedad, mientras que 42 millones de personas, cuya mitad son mujeres, viven con el virus o han desarrollado el sida, según cifras de UNAIDS, la agencia de las Naciones Unidas que se encarga de combatir la epidemia mundial.
"Lo más sorprendente es que por primera vez la mujeres constituyen el 50 por ciento de la epidemia global", dijo Peter Piot, presidente de UNAIDS, durante una entrevista.
"En África, el 58 por ciento de las personas que portan el VIH está compuesto por mujeres. El rostro del SIDA está tomando las facciones de una mujer joven", añadió Piot durante una entrevista con motivo del Día Mundial del SIDA, que se celebrará el 1 de diciembre.
Las dinámicas cambiantes en la incidencia del VIH y el SIDA significan que un número mayor de bebés podría infectarse a través de sus madres. Además, las mujeres, que tradicionalmente han sido las cuidadoras del hogar, están siendo golpeadas fuertemente por la enfermedad, lo que deprime a sus esposos, padres y hermanos.
La situación ha empeorado
El SIDA ha matado a más de 25 millones de personas en el mundo desde que se descubrió por primera vez en la década de los ochenta, pero en la actualidad está contribuyendo a otros desastres, especialmente en Sudáfrica, el país más afectado por la epidemia.
"Ha exacerbado la crisis de alimentos. Esto es nuevo. Creo que estamos comenzando a ver el verdadero impacto del SIDA en los países más afectados", señaló Piot.
La sequía y la hambruna no son problemas nuevos en África, pero en las naciones con un cuarto de su población enferma de SIDA, estos factores han contribuido a intensificar la crisis.
"Ahora es mucho peor, porque la producción agrícola ya ha disminuido debido al SIDA, pero las demandas nutritivas de la comunidad han aumentado debido a que la gente está enferma y necesita más comida", añadió Piot.
Las cifras muestran que para diciembre del 2002, África será la región más afectada, con 29,4 millones de infectados. Le siguen Europa del Este y Asia Central con 1.2 millones de casos.
En Asia la pandemia crece aceleradamente, pero la verdadera bomba de tiempo se halla en China y en la India.
Se estima que un millón de personas en China son portadoras del VIH. Si no se toman medidas urgentes, la cifra podría aumentar a 10 millones de infectados ?equivalente a la población completa de Bélgica? a finales de esta década, según un informe.
"Cuando se analizan las cifras mundiales, no se ve progreso.
Estas cifras dependerán en gran medida de lo que pase en Asia, donde el factor de población es mucho mayor que en cualquier otra parte", dijo Piot.
En América del Norte y en Europa Occidental, la introducción de medicamentos contra el SIDA en 1995-1996 provocó una disminución dramática en la tasa de muertes por SIDA.
Investigadores también reportaron un aumento de las prácticas sexuales sin protección y en la transmisión del virus por contactos íntimos heterosexuales.
Pero hay algunas buenas noticias
Piot, sin embargo, recalcó que muchos países están registrando evidencia de que la cifra de nuevas infecciones está disminuyendo.
En Sudáfrica, la prevalencia del VIH entre las embarazadas menores de 20 años disminuyó un 15.2 por ciento en el 2001, en comparación con el 21 por ciento en 1998.
El informe destaca un declive similar en la incidencia del virus entre las jóvenes de zonas urbanas de Addis Ababa, Etiopía.
"Por primera vez en años disponemos de evidencia sólida de que la prevención funciona incluso en las naciones más pobres", expresó Piot.
"Hay mucho más dinero destinado a las actividades relacionadas con el SIDA. Aún no es suficiente, pero al menos estamos observando un progreso. Por eso considero que esto es parte de la buena noticia", agregó.
Las compañías farmacéuticas han reducido los precios de los fármacos antiSIDA. Países, como Botswana y Nigeria, y algunas empresas, están implementando programas para ofrecer tratamiento a los enfermos con SIDA.
Sin embargo, Piot dijo que sólo una pequeña minoría de enfermos, en su mayoría en las naciones desarrolladas, está recibiendo tratamiento.
"Las reducciones en el precio son reales, pero incluso si se trata de un dólar diario, alguien tiene que pagarlo. Nos estamos concentrando en el entrenamiento de médicos y enfermeras, y en recaudar el dinero para esto. Los países pobres sólo podrán hacerlo si el dinero viene del exterior", añadió.
"El gran problema es África, el continente más pobre (del mundo) y con mayor número de infectados", señaló Piot.
UNAIDS calcula que para el 2007 el mundo tendrá que recaudar 15,000 millones de dólares anuales para tratar y combatir al SIDA de manera satisfactoria.