Notimex
Belgrado, Yugoslavia.- El aumento registrado en el índice de suicidios en Nis, en el sureste de Serbia, es consecuencia de un síndrome post bélico denominado “Síndrome de Vietnam”, que es la inadaptación a vivir en paz de aquellos que conocieron la guerra.
En Nis, un importante centro industrial, se han registrado en lo que va del año 78 suicidios, dos veces más que el año pasado.
Entre los suicidas, 39 eran menores de 30 años de edad, y 17, menores de 50. Entre la diversidad de los casos, muchos de los cuales pueden ser atribuidos al síndrome post bélico, empieza a imponerse la idea de que el fenómeno tiene que ver con la cuestión social.
Especialistas en sociología hablaron sobre el síndrome, al conocerse el más reciente caso de suicidio, de un militar profesional, condecorado en la campaña contra la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) hace tres años.
El hombre, de quien no se reveló su identidad ni el grado pero trascendió que era un veterano de las guerras de secesión de la ex Yugoslavia, se ahorcó en el molino donde trabajaba.
Médicos, psicólogos y sociólogos del Instituto de Salud Mental de Nis sostienen que el Síndrome de Vietnam puede aparecer poco tiempo después del licenciamiento de un militar, o años después.
Djordje Jovanovic, profesor de Psicología en la universidad de Nis, sostiene que además de la patología post bélica poco estudiada en este país, el factor social influye sobre los suicidios.
Así explica que, por primera vez, haya aparecido una categoría de hombres jóvenes y con estudios, que resuelven sus problemas sociales mediante el suicidio.
Según un análisis de la revista política belgradense Reporter sólo así se puede explicar el suicidio de Oliver Todorovic, diplomado en matemáticas, que se tiró desde un piso 13.
Jovanovic sostiene que la numerosidad de los suicidios y sus causas aparentemente menos patológicas y más sociales, reclaman una acción del gobierno del cual dice “permanece con los brazos cruzados, el tema no le interesa”.
Según la fuente, más personas de Nis se suicidaron en los últimos 10 años de crisis económica y social que las que perdieron la vida en las guerras de la década pasada, incluidos los bombardeos de la OTAN.
Se da el curioso caso de que actualmente hay más suicidios que hace 50 años al finalizar la Segunda Guerra Mundial, cuando perdieron la vida 1.7 millones de yugoslavos, 10 por ciento de la población.
Sociólogos atribuyen la diferencia a que después de aquella contienda aumentó el optimismo en la sociedad y lo confirmaban los índices de nupcialidad así como la rápida recuperación demográfica con 550 mil alumbramientos al año, contra los 330 en tiempos llamados normales.
Estiman que el actual pesimismo social se debe a la larga duración de la transición social en la cual desde hace 10 años no se entrevé como será la futura sociedad y qué puesto le corresponderá a cada uno.
Algunos, que lo ven peor que los demás, optan por una solución radical que, según el análisis de Reporter, no es sino una petición de socorro.