Los Pumas de la Universidad no tuvieron piedad del rival y en una tarde plena de aciertos nomás le metieron 7 goles a las Chivas Rayadas del Guadalajara; este tipo de marcadores no son frecuentes en el futbol aunque ya los mismos universitarios fueron sacudidos por el Atlas y esta misma jornada Toluca reventó a Tecos como ya lo había hecho con el Puebla. Sin embargo, se tienen que presentar situaciones especiales para que, con jugadas, permitan una diferencia tan grande en el marcador.
El equipo de Hugo Sánchez jugó de la única manera que sabe hacerlo, es decir, buscando afanosamente el marco rival y pisando el área con varios elementos; además, es impresionante la dinámica que imprimen en su juego así como la forma de disputar cada balón con todo, siendo necesario hacer un reconocimiento al trabajo físico que muestra en cada encuentro. Pero además tuvieron la suerte de frente, por ejemplo cuando anotan el primer gol en fuera de juego y después el asistente Balderas valida como gol un tiro de Lozano al larguero y Johny García anota en su propia meta. Así, estará de acuerdo conmigo Daniel Guzmán, no se puede trabajar.
Del otro lado, Chivas se había mostrado como un cuadro sólido sobre todo a la defensiva al grado que hasta el juego ante Pumas sólo había recibido 13 goles que lo colocaban como una de las mejores zagas del Torneo. Además es el equipo con más empates, 8, y ello habla de lo difícil que ha resultado vencerlos.
Pero no, el equipo que saltó a la cancha de Ciudad Universitaria no es el Guadalajara de siempre; faltó humildad, talento, sacrificio y carácter. Dejando a un lado a un indefenso Oswaldo Sánchez, el resto se comportó como una pandilla de impostores enlodando el prestigio de un club cuya afición semeja una religión.
El resultado le sirve a Pumas para enfrentar con desahogo, enrachado y confiado, el compromiso de la Pre-Libertadores ante los equipos venezolanos y tramitar con prestancia la recta final de la Liga. A Chivas en cambio, esta sacudida debe dejar como lección que siendo su plantel limitado en hombres y talento, debe jugar cada encuentro como si fuera una final de campeonato.
Por un lado, la sonrisa del pentapichichi, quien además parece haber logrado su graduación como entrenador y ya no sólo como motivador, revela que Pumas será un invitado incómodo a la Liguilla. Del otro, las palabras entrecortadas del "Travieso" revelan el temor de que el equipo se le caiga a pedazos.
Los próximos compromisos de ambos parecen presentarse para sumar; el rebaño recibe a Veracruz y Pumas va a San Luis.
Ojalá que el cuerpo técnico rojiblanco tenga la medicina adecuada para levantar la moral al equipo después de la masacre en CU, no sea que vaya a querer intervenir el "Doctor" Jorge Vergara.
Dentro del campeonato es un hecho que Toluca y América juegan en otra división; el agónico pero merecido triunfo de las Águilas en Puebla y la tunda que Toluca le dio a Tecos así lo demuestran. Sin embargo hay que aplaudir lo que está haciendo el Atlante pues tiene un plantel lleno de jóvenes que al momento de madurar seguramente darán satisfacciones a su hoy escasa pero fiel afición.
Ya se enrachó el Potro, hace mucho que no pierde y ahora hasta lo invicto le quitó al Santos de Luis Fernando Tena.
En un descuido y viendo lo flojo de su grupo, los azulgrana hasta la liguilla juegan.