Notimex
México, D.F.- El presidente Vicente Fox afirmó ayer que “es crucial” luchar con todo para atacar la difícil situación en la que viven los grupos vulnerables de las sociedades de Las Américas, “que erosiona el cimiento mismo de nuestras naciones”.
Al participar en la inauguración de la XI Conferencia de Esposas de Jefes de Estado y de Gobierno de las Américas, el mandatario señaló que un desarrollo verdadero tiene que ser compartido, tanto en el interior como entre las naciones.
“Ningún país puede considerarse desarrollado, ningún país puede llamarse a sí mismo civilizado, si el bienestar derivado del crecimiento económico no beneficia a todas y a todos, a cada uno de sus habitantes, a cada una de sus familias”.
En el Palacio de Bellas Artes, ante primeras damas y representantes de alrededor de 30 naciones, entre ellas Laura Bush, Aline Chrétien y Ana Botello de Aznar, el mandatario mexicano destacó que en un mundo marcado por la globalización, el bienestar de cada uno de los pueblos depende del de los demás.
Debemos, dijo, encontrar la forma para que las sociedades y gobiernos, los organismos internacionales, las organizaciones no gubernamentales, sirvan trabajando de manera conjunta a favor de un desarrollo que se refleje en forma muy clara en un mejor nivel de vida para todas y cada una de las personas de este Continente Americano, “el Continente del Siglo XXI”.
Señaló que se requiere la acción decidida de los gobiernos para superar la situación de pobreza en que viven miles, millones de niñas y niños en el hemisferio, pero también se requiere el apoyo solidario de las sociedades.
Tanto el sector privado como las organizaciones civiles, los organismos internacionales, en particular los de carácter financiero, públicos y privados, así como el esfuerzo de todos y cada uno de nuestros países nos dará la fórmula del éxito, expresó el mandatario.
Anotó que en la promoción de este esfuerzo se requiere de una sólida voluntad política y trabajo en conjunto y sostenido, y exhortó a todos a que promuevan un nuevo espíritu de corresponsabilidad para avanzar en la solución de los graves problemas que afectan a la niñez de las naciones.
“Se trata de un compromiso ineludible con nuestras chiquillas y nuestros chiquillos, con nuestro presente más valioso a la vez que más vulnerable. Se trata de nuestro futuro; se trata, finalmente, de un compromiso con nosotros mismos, con nuestros países”, subrayó.
En su discurso, que fue interrumpido por aplausos en dos ocasiones, el presidente Fox comentó que en México, el gobierno humanista que encabeza ha puesto su atención en las personas y considera que las y los niños son lo más preciado que tenemos.
“En buena medida son ellas y ellos por quienes luchamos -enfatizó- día a día por un mundo mejor, quienes con sus logros y sus sonrisas sostienen permanentemente nuestra esperanza, nuestra energía, nuestra pasión, quienes con su inteligencia y buena fe muchas veces nos ponen el ejemplo”.
Dijo que no debe haber una sola niña o niño que sea privado de desarrollar su talento y sus capacidades en beneficio propio, de su comunidad y de su familia, toda vez que no es sólo una cuestión de derechos y justicia, sino que su futuro y el nuestro dependen de que seamos capaces de otorgarles tales oportunidades.
Hizo ver que una cobertura amplia y de calidad en materia de alimentación, salud, educación y protección a los derechos de la niñez, es la mejor herramienta que tenemos para lograrlo, por lo que se requiere el apoyo decidido, el trabajo en equipo de los gobiernos y de las sociedades.
Al término del evento, el presidente Fox, su esposa, Marta Sahagún, y las primeras damas, representantes e invitados especiales que participan en esta Conferencia, se trasladaron al Palco de Honor para observar un espectáculo artístico cultural.
Posteriormente, en la sala “Internacional” del Palacio de Bellas Artes se realizó la fotografía oficial de las Esposas de Jefes de Estado y de Gobierno de las Américas y hubo un coctel de honor ofrecido por el presidente Fox y su esposa Marta Sahagún.