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La Habana, Cuba.- En los hechos el gobierno mexicano se está sumando al bloqueo en contra de Cuba, al no cumplir más de 40 convenios y tratados bilaterales en materia de educación, salud, tecnología, migración y cultura, advirtieron con preocupación legisladores del PRI y el PRD.
El tema no fue debatido abiertamente durante los trabajos de la Quinta Reunión Interparlamentaria Cuba-México, aunque el senador priísta Carlos Rojas Gutiérrez, planteó durante esa reunión que se formule un llamado respetuoso a los gobiernos de ambas naciones para agilizar el cumplimiento de los convenios bilaterales.
Dado el clima de cordialidad en que se desarrollan los trabajos, los legisladores cubanos no trataron ese asunto, pero senadores y diputados mexicanos expresaron en entrevistas preocupación por ese hecho. El priísta Carlos Rojas Gutiérrez dijo que después de una primera revisión para dar seguimiento a los convenios bilaterales entre México y Cuba “encontramos que el balance es muy negativo, porque muchos acuerdos no han tenido como resultado acuerdos concretos”.
Es decir, precisó, se han suscrito, pero el gobierno mexicano no los cumple y eso “es muy lamentable, porque demuestra una muy escasa voluntad política, nula diría yo y eso nos coloca como boicoteadores de esos acuerdos, en un apoyo tácito al bloqueo”.
Rojas Gutiérrez hizo notar que hay más de 40 acuerdos y convenios que involucran a las secretarías de Salud, Educación, Turismo y Pesca, al IMSS, al Conacyt y otras instituciones y que, habiendo incluso compromisos firmados, no se han cumplido.” Uno de esos casos de incumplimiento es el de los libros de texto gratuito, al que se refirió de manera tan lamentable el canciller Castañeda”.
Se violentó un convenio “y por lo que nos han expresado aquí, Cuba nunca expresó alguna intención de ni cubrir el costo económico por la impresión de libros para instrucción básica, por lo que todo indica que sólo es un gesto más de mala voluntad que afecta en este caso a miles de niños cubanos y nos coloca como país en una posición inaceptable”, agregó el senador Rojas.
Igualmente, el también senador del PRI. César Camacho Quiroz, deploró que “ en los hechos el gobierno de Vicente Fox se esté sumando al bloqueo contra Cuba” y el diputado del PRD, Jaime Martínez Veloz, consideró que el poder legislativo debe alzar la voz para que la actual administración cumpla con los compromisos del país en materia internacional.
Martínez Veloz precisó que sin que incluso la delegación lo haya llevado a la mesa de discusiones, “de las exposiciones que se han vertido, se concluye que desde el sexenio de Zedillo hasta la fecha, se han desconocido acuerdos ya firmados y se ha retrasado la firma de otros, en una clara estrategia de cancelar todo intercambio con Cuba”.
Por la mañana los trabajos de la Quinta Reunión Interparlamentaria Cuba-México fueron abiertos a la prensa y los temas discutidos fueron migración y el seguimiento a los acuerdos a que se llegó en el pasado encuentro entre legisladores, realizado en Veracruz, en junio del 2001.
De inmediato, legisladores priístas y perredistas advirtieron sobre la falta de acuerdos. El diputado del PRD, Sergio Acosta Salazar, hizo notar que se ha visto pocos avances y otros legisladores mexicanos como Camacho Quiroz y el perredista Marcos Cruz insistieron en la necesidad de dar seguimiento a los acuerdos y compromisos entre gobiernos y el senador Rojas Gutiérrez planteó formular un llamado a los gobiernos de ambos países.
Entonces el senador del PAN, Javier Corral Jurado, pidió a los demás integrantes de la delegación tomar en cuenta los límites constitucionales de los legisladores en el caso de exhortos al ejecutivo. Rojas Gutiérrez le dio la razón, pero dijo que “no es deleznable en ningún sentido el que se invite, con los matices diplomáticos adecuados, al cumplimiento de acuerdos y a la puesta en marcha de trabajos que sólo buscan el beneficio social”.
Los cubanos no intervinieron en esa discusión y por la tarde permanecieron también callados cuando otra vez priístas y perredistas sacaron a relucir la intención del canciller Castañeda de minimizar esa Interparlamentaria. Pese a la molestia de Cecilia Romero, presidenta de la delegación y de los demás panistas, Camacho Quiroz recordó lo expresado en México por el entonces subsecretario Gustavo Iruegas, en el sentido de que la reunión no serviría ni para bien ni para mal.
El ex gobernador mexiquense insistió en que el congreso mexicano debe trabajar mucho para lograr que se cumplan todos los compromisos, por que se conviertan en acciones concretas.
Por lo que se refiere a migración, hubo consenso entre los parlamentarios mexicanos y cubanos en el sentido de impulsar desde el ámbito legislativo, el acuerdo bilateral en la materia en el que trabajan los gobiernos de Castro y Fox. Al respecto, el senador del PRD, Marcos Cruz Martínez, fijó la postura de la delegación visitante y destacó que en los últimos tres años se ha incrementado de manera significativa el número de residentes cubanos en México, al llegar a 11 mil personas.
Es preocupante, recalcó, que en lo que va del año se ha incrementado el número de aseguramientos, devolución y rechazo de migrantes cubanos en situación irregular, así como la atención que se ha brindado en tres ocasiones al arribo de balseros cubanos a México.
El diputado cubano Tubal Paez Hernández, aclaró que las leyes de Estados Unidos privilegian peligrosamente la migración de ciudadanos cubanos, usando a México como puente. Es un problema, precisó, en el que se ha avanzado mucho en la firma de convenios, hay voluntad y sólo falta concretar acciones.
Al respecto, el diputado del PT, Alberto Anaya, expresó que desde la época de Zedillo “se viene endureciendo en México el trato a los cubanos migrantes, no sólo hacia quiénes tratan de ingresar ilegalmente al país, sino incluso a académicos, investigadores y estudiantes incluidos en programas de intercambio, en base a acuerdos entre universidades.
Anaya, quien preside el Grupo Parlamentario de Amistad México-Cuba, pidió a Romero llevar a cabo las gestiones necesarias ante la cancillería, para que se dinamicen las visas respectivas, porque ahora “tenemos que ver los casos con el propio secretario de Gobernación, Santiago Creel y nada más falta que tengamos que pedir la intervención del Presidente de la República o del Papa”.
La diputada cubana María Ruiz Maderos, precisó que hay más de 218 acuerdos firmados con universidades de ambas naciones en materia de intercambio, y hay “pequeñas fallas” en su instrumentación, en las que los legisladores deben trabajar, “para no frenar la preparación de nuestros jóvenes”.
Antes de la reunión vespertina, los tres diputados del PAN -Tarcisio Navarrete, Manuel Espino y Verónica Sada Pérez- abandonaron los trabajos de la Interparlamentaria y regresaron al Distrito Federal para votar en la instalación de la Sección Instructora, dentro del proceso para desaforar a los dirigentes petroleros.
Prometieron regresar este viernes, lo que es poco probable, dadas las condiciones climáticas en la isla. La mayor parte de los integrantes de la delegación rechazó la invitación a almorzar que les formuló el encargado de negocios de la embajada, Andrés Ordoñez. Sólo asistieron Cecilia Romero y otros panistas, los demás consideraron que no se prestarían al juego de la cancillería. “Ni siquiera sabemos si la representación diplomática está o no acéfala”, dijo Martínez Veloz.