Un agricultor francés, que ganó más de un millón de euros a la lotería en 1999, se sentó hoy en el banquillo de los acusados del tribunal de Riom (centro) por haber dejado morir de hambre a sus rebaños de vacas y ovejas.
Con el dinero ganado, Jacques Bréchard, de 56 años, compró un rebaño de más de 300 cabezas, entre ellas algunas razas raras de vacas, que no fueron alimentadas debidamente en su finca de 37 hectáreas, según los veterinarios.
Entre enero de 2000 y mayo de 2002, murieron 284 bovinos en su explotación y otros fueron hallados en estado de debilidad hasta el punto de que no podían ponerse en pie.
El pasado 23 de julio, cuando aparecieron las primeras denuncias de asociaciones defensoras de animales, las autoridades retiraron el resto del rebaño del cuidado de Bréchard por causa de su "miseria fisiológica".
Los animales fueron entregados a otro ganadero de la zona y los gastos son sufragados por la Fundación de defensa de los animales Brigitte Bardot, que se ha gastado ya 80.000 euros en el asunto.
El abogado del acusado afirmó que su cliente prestó mucho dinero cuando le tocó la lotería y que no se lo devolvieron cuando le hizo falta.
"Denuncio públicamente el chanchullo de los poderes públicos. Quieren mi piel", afirmó Bréchard. EFE