La Jornada
San Antonio, Tex.- Un ejército de “vigilantes” estadunidenses autodenominados Patrulla Fronteriza Americana (American Border Patrol), inició operaciones permanentes con equipo de alta tecnología y aéreo para monitorear el cruce de indocumentados en varios puntos de la frontera México-Estados Unidos, y a partir de este fin de semana transmitirá al público reportes “en vivo” para “mostrar la verdad sobre sus fronteras”.
Los ciudadanos afiliados a la organización se llaman “ojos de halcón” (Hawkeyes) y están constituyendo una red nacional para recabar información sobre cruces ilegales de personas, incluso de elementos del Ejército mexicano, en un área de vigilancia permanente que comprende diez zonas fronterizas de California, Arizona y Texas.
La Patrulla Fronteriza Americana (PFA) también inició reconocimientos aéreos con aviones privados y pilotos voluntarios que volarán costeando la frontera. En un futuro próximo planean adquirir un helicóptero y también vigilar las costas marítimas fronterizas de California y Texas. Aunque para el creador y coordinador de la nueva agrupación, Glenn Spencer, la recepción y apoyo ciudadano a su proyecto “han sido extraordinarios”, para la directora de la Coalición de Derechos Humanos de Arizona, la abogada Isabel García, ésta sólo “crea un enorme potencial para una gran tragedia en la frontera”.
El cuartel general y centro de acopio de información de la PFA se instaló en una casa móvil en las afueras del poblado de Sierra Vista, Arizona, a unos metros de la línea limítrofe con México. Se ubicó ahí por la existencia de pistas aéreas adecuadas, la cercanía para desplazarse al este u oeste de la línea divisoria y la cercanía con el Centro de Inteligencia militar Fuerte Huachuca, en el condado de Cochise. En esa región, el número de indocumentados aprehendidos aumentó 500 por ciento de 1995 al año 2000, según cifras oficiales.
La base de la PFA contará con sistemas de antenas satelitales para hacer transmisiones por internet y televisión, equipo telefónico satelital, computadoras, cámaras de video y digitales, sistema de posicionamiento global satelital (GPS) y equipo de video-edición.
Tal equipamiento permitirá emitir información instantánea en video, audio y fotografías por internet. Además podrán recibir 200 llamadas telefónicas cada hora y reportes electrónicos de los “Hawkeyes” ubicados a lo largo de 3,200 kilómetros de frontera.
Se calcula que se requirieron 40 mil dólares aproximadamente para equipar este centro, provenientes de donativos financieros y en especie, ya que las aportaciones son deducibles de impuestos debido a su status de agrupación sin fines lucrativos, otorgada por el Servicio Federal de Ingresos Internos (IRS, por sus siglas en inglés). El fundador, promotor y coordinador de la PFA es Glenn Spencer, un consultor computacional retirado y conocido activista antiinmigrante en California, donde opera hace años el grupo “American Patrol”, cuyo website se ha convertido en la principal fuente de propaganda contra la inmigración ilegal.
Spencer es un piloto experto que utilizará su avión en misiones de reconocimiento aéreo fronterizo desde los cuarteles en Sierra Vista, apoyado por otros pilotos voluntarios del área. Dijo también tener planes para que la PFA cuente con su propia guardia costera para vigilar las áreas marítimas de la frontera con California y Texas.
Según Spencer “es tiempo de decir la verdad a la gente sobre lo que pasa en nuestras fronteras”. La idea es tener acceso a información real sobre la inmigración indocumentada que entra ilegalmente a Estados Unidos por México y evaluar la eficacia de la Patrulla Fronteriza oficial estadounidense, la Border Patrol, sostuvo.