Londres.- El estudio, del Instituto Nacional de Sanidad Pública y Medio Ambiente de Holanda, indica que la cafeína y otros componentes del café, como el magnesio y el ácido clorogénico, causan un efecto similar al de la insulina y reducen la probabilidad de padecer diabetes del tipo 2.
Los expertos, bajo la dirección del profesor Rob van Dam, llegaron a esta conclusión tras estudiar, desde 1987 a 1997, los hábitos de consumo cafetero de más de 17.000 hombres y mujeres holandeses, de edades comprendidas entre los 30 y los 60 años
Así, los investigadores comprobaron que aquellos participantes que bebían, al menos, siete tazas de café al día tenían un cincuenta por ciento de posibilidades menos de padecer la enfermedad que quienes sólo tomaban un máximo de dos tazas diarias.
La investigación "sugiere que otros componentes del café, aparte de la cafeína, podrían ser beneficiosos para el metabolismo de la glucosa", cuya cantidad en la sangre está normalmente regulada por la hormona de la insulina, explica Rob van Dam en "The Lancet".
Sin embargo, el profesor holandés también advierte de que "los posibles efectos negativos (del café) en otros aspectos de la salud deberían considerarse a la hora de optar por el consumo de café".
Aunque los participantes en la investigación tomaron poco té durante los diez años de observación, los autores del estudio pudieron averiguar que esta infusión no parecer estar relacionada con el riesgo de contraer diabetes del tipo 2.