México (Notimex).- Alrededor de 300 mil pesos al año le cuesta al Estado el tratamiento a pacientes que sufren enfermedades causadas por el tabaquismo, aseguró la directora de la Clínica Contra el Tabaquismo de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Guadalupe Ponciano Rodríguez.
En entrevista con Notimex, agregó que este dato se deriva de un estudio realizado el año pasado por el Instituto de Salud Pública de Cuernavaca y que está relacionado con el consumo de esta droga lícita.
Añadió que esta cifra corresponde únicamente a medicina social, y en el caso de que el paciente sea tratado en una clínica particular los gastos se duplican.
La Organización Mundial de Salud reportó que el consumo del tabaco en sus diferentes formas provoca más muertes que las ocasionadas por Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida (Sida), por accidentes automovilísticos, suicidios y materna, acotó Ponciano.
Es decir, indicó la especialista, quien desde hace un año dirige esta clínica ubicada en la Facultad de Medicina de Ciudad Universitaria, la suma de todas estas muertes da como resultado el número total de decesos por tabaquismo.
Apuntó que actualmente se sabe que cada año cuatro millones de personas pierden la vida a causa de esa enfermedad y se prevé que para el 2030, la cifra se elevará a diez millones.
"El problema es que de estos diez millones, siete millones van a ser habitantes de los llamados países en vías de desarrollo como México", cuyos números no son nada halagadores, expresó Ponciano. Dijo que en México, el tabaquismo se considera un problema importante de salud pública, pues de acuerdo con la última Encuesta Nacional de Adicciones (1998) -el 2003 se llevará a cabo la próxima- existen 14 millones de fumadores activos en el país.
A ello, continuó, hay que agregarle un porcentaje importante de ex fumadores, quienes siempre representan un grupo de riesgo, porque no se sabe en qué momento puedan volver a adquirir el hábito y por consecuencia no se pueden excluir de la estadística.
Estos 14 millones, agregó, equivalen al 27.7 por ciento de prevalencia en la población de zonas urbanas de México cuyas edades oscilan entre 12 y 65 años y se prevé que en la próxima encuesta, se registren fumadores que inician desde los diez años de edad.
Datos más alarmantes, son los que se refieren a la mortandad, según los últimos dados a conocer por la Secretaría de Salud, alrededor de 145 mexicanos mueren diariamente por enfermedades asociadas con el consumo del tabaco.
Esta cifra, multiplicada por los 365 días del año, expresó la investigadora de la UNAM, da como resultado 52 mil 925 muertes anuales, por enfermedades asociadas al consumo del tabaco como son las cardiovasculares (todos los infartos y todas las relacionados con el corazón) y las cerebrovasculares (embolias cerebrales).
A estas dos enfermedades habría que agregarle las clásicas como son el cáncer pulmonar, la pulmonar obstructiva crónicas, enfisema y bronquitis, pero estas no son las únicas, existen muchas más, acotó. Ponciano dijo que el humo del tabaco es una mezcla muy compleja de alrededor de cuatro mil 500 sustancias químicas que tienen efectos variados en el organismo: desde irritantes inflamatorios citotóxicos (que son tóxicos para las células) hasta mutagénicos y cancerígenos.
"Esta cantidad de sustancias, de las cuales 46 son productoras de cáncer, nos hace entender -comentó-, el por qué el humo del tabaco tiene un efecto sistemático en todo el organismo.
"Hemos visto en México que se están muriendo más pacientes con enfermedades cardiovascasociadas con el tabaco que por cáncer de pulmón", subrayó.
Ponciano abundó que del número total de muertes por enfermedades cardiovasculares, alrededor del 45 por ciento, casi la mitad, se asocian con el tabaco, lo mismo ocurre con las cerebrovasculares: del total de muertes al año por este mal, el 51 por ciento se relacionan con esta adicción.
"La mayoría de la gente que tiene un infarto o una embolia, no lo relacionan con el humo del tabaco, y hay que relacionarlo porque es uno de los principales daños de salud mundial", concluyó la especialista.
NTX