(1) No se culpe a sí mismo. El cáncer no es causado por problemas emocionales o trauma psicológico. No hay tal cosa, hasta donde se sabe, de una “personalidad cancerosa”. Empero, ciertos estilos de vida, como fumar y comer muchas grasas, pueden hacer la diferencia. (2) No asuma de inmediato que el cáncer va a ser fatal. Muchos cánceres son completamente curables cuando son detectados oportunamente. Algunos son incluso curables cuando se les descubre en etapas posteriores. (3) Tome un papel activo en su tratamiento. Lea todo lo que pueda. Encuentre un médico con quien establezca una buena “química” y participe activamente en todo lo que le prescriba. (4) Todos hemos oído horrores acerca de los efectos secundarios de la quimioterapia y la radioterapia. Aunque los efectos, como los vómitos y las náuseas son una realidad, hoy son mejor controlados que en el pasado. Los efectos secundarios son temporales, pero los beneficios del tratamiento son a largo plazo. (5) Practique en todo lo que pueda técnicas de adaptación. El ejercicio, la lectura y la comunicación con la familia le pueden ayudar a enfrentar la situación más adecuadamente. Encuentre modos de distraerse. Si usted no lo hace, nadie puede hacer el trabajito. (6) Sea abierto acerca de sus temores. Si usted está asustado, dígaselo a sus familiares y amigos. Ellos son la fuente mayor de apoyo que usted pueda tener. Y la gente que se siente apoyada por lo general tolera mejor la enfermedad y los tratamientos, e incluso se ha comprobado que tienen mejores pronósticos. (7) No se preocupe si ocasionalmente se siente triste o desalentado.