Reiteradas quejas de los vecinos no han sido escuchadas por las autoridades
Torreón, Coah.- Los fraccionamientos Aviación y Satélite tienen en común las deficiencias en los servicios públicos: calles a medio pavimentar, inseguridad y terrenos baldíos llenos de escombro y basura, entre otros problemas.
Durante un recorrido realizado por El Siglo de Torreón en los fraccionamientos Aviación y Satélite, se constató que las quejas de los vecinos han sido atendidas a medias. Les prometieron retirar los montones de escombro y basura, pero sólo lo hicieron en la entrada de los sectores habitacionales.
La pavimentación de ambos fraccionamientos se encuentra a medias, tal es el caso de la avenida Urano, donde la arteria vehicular está divida por un camellón central, sin embargo conforme avanza el trayecto de los automovilistas o peatones, la carpeta asfáltica se termina y un carril se convierte en doble con el peligro que esto representa.
En el fraccionamiento Aviación, sobre la calle Aristóteles el pavimento también está a medias. Resulta imposible acceder a la calle Astros porque además de que no hay carpeta asfáltica, la calle se encuentra llena de enormes piedras, escombro y basura.
Algunas amas de casa comentaron a este medio de comunicación que desde la formación de ambos fraccionamientos jamás se ha rehabilitado la carpeta asfáltica. Además tampoco se ha atendido la solicitud de pavimentar la calle Astros, Urano, entre otras.
Los terrenos baldíos también son un problema para los habitantes de ambos sectores habitacionales. Hace algunos meses la empresa constructora se dio a la tarea de quitar el escombro y basura que se encontraban a la entrada de los fraccionamientos.
Sin embargo existen otros lotes baldíos que no han sido limpiados. Decenas de calles se encuentran invadidas por escombro y todo tipo de desechos, a decir de los vecinos por eso ha proliferado fauna nociva y animales ponzoñosos.
La inseguridad pública prevalece en los fraccionamientos Aviación y Satélite. De acuerdo a María Inés Sifuentes, vecina del lugar, en numerosos ocasiones han sido víctimas de robos, sospechan de los albañiles que durante el día construyen más viviendas y como la mayoría de los vecinos se ausentan de sus casas muchas horas por sus trabajos, han aprovechado esta circunstancia.
A pesar de la oleada de robos, dice, la vigilancia resulta insuficiente: “si pasan las patrullas, pero los robos siguen, nosotros pensamos que los responsables también pueden ser los hijos problemáticos de ciertos vecinos porque conocen todos nuestros movimientos”.