Torreón, Coah.- Manuel Santoyo y Arturo Espinoza, médicos involucrados en el caso del recién nacido que murió luego que durante el parto aspirara líquido amniótico y que no dieron parte a las autoridades competentes, se les giró una orden de presentación con la cual elementos de la Policía Ministerial tienen facultades de localizarlos y llevarlos a declarar ante el Ministerio Público.
Lo anterior, luego que hasta el momento, ninguno de los facultativos ha acudido en forma voluntaria para dar la versión de los hechos en los que se vieron implicados, informó Carlos Falcón Sifuentes, titular de la Coordinación “A” de agencias del Ministerio Público de Delitos Contra la Vida y la Salud Personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).
Recordó que los hechos se registraron la madrugada del viernes 13 de diciembre, cuando Ana Lilia López Saucedo, de 28 años de edad, fue atendida de parto en el consultorio del doctor Manuel Santoyo, ubicado en calle Cuicuilco y calzada Xochimilco de la colonia Carolinas. Ignorando hasta el momento por qué no la canalizó a una unidad médica o bien a la Cruz Roja.
El citado galeno decidió recibir al bebé en el consultorio, sin pensar que fueran a presentarse complicaciones durante el alumbramiento, pues el infante aspiró líquido amniótico y hubo necesidad de llevarlo al Hospital Infantil para su atención, pero por desgracia llegó sin vida, negando su ingreso el doctor Arturo Espinoza.
En lugar de informar a las autoridades del Ministerio Público de lo anterior, Ana Lilia y el médico Santoyo decidieron llevarlo hasta la casa de Blanca Lorena Hernández Rocha, de 29 años, con domicilio en Privada Argentina No. 15 de la colonia Aviación, quien cuida a los otros tres hijos de la parturienta por las noches, ya que ella trabaja como cajera en el bar Coctel 2 (antes bar 33), ubicado por el bulevar Revolución frente a la Unidad Deportiva Torreón. Esto fue a las 04:00 de la madrugada del 13 de diciembre, tres horas después del nacimiento.
Ahí, la madre del recién nacido dejó el cadáver, pues “iba a conseguir dinero para darle cristiana sepultura”, retirándose con el doctor, pero a su domicilio, donde por la mañana la encontraron agentes de la Policía Preventiva.
Tras aclarar la situación y verificar que el deceso del infante se debió a causas naturales, se dejó en libertad a ambas mujeres, sin embargo, hasta el momento no se han presentado los dos facultativos para que den a conocer su versión de los hechos, por lo que mediante una orden de presentación se les obligará a acudir al Ministerio Público, terminó diciendo Falcón Sifuentes.