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Belgrado, Yugoslavia.- Los alcaldes de cinco municipios serbios amenazaron con llamar a la población a oponerse a la venta de 120 mil hectáreas de tierras para una base militar, que pertenecería a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Los alcaldes de los municipios de Despotovac, Paracin, Cuprija, Zagubica y Boljevac consideran perjudicial una base tan enorme, sobre una superficie de más de mil kilómetros cuadrados, tanto a la agricultura como a la seguridad general de la población.
El alcalde de Paracin, Predrag Tonkovic, declaró a la revista política semanal de Belgrado Nedeljni Telegraf (NT), que si el gobierno ha anunciado reducir sus fuerzas armadas para que necesita una base militar tan extensa.
Denunció al Estado Mayor central del ejército de no presentar a los alcaldes un plan de ventajas que tendría la población de los cinco municipios con la ampliación de la base prevista primero para 44 mil hectáreas y en una segunda fase, a 120 mil.
Hace dos semanas tuvo lugar en la zona una importante maniobra militar sin ecos en la prensa, con blindados, misiles, helicópteros y ejercicio de tiro de toda clase de armas, a la que fueron invitados por el ejercito los alcaldes, quienes rechazaron asistir.
Según la revista la actitud de los cinco alcaldes es una prueba de como ha cambiado la mentalidad de las corporaciones públicas, los municipios, con la economía de mercado, introducida en el país hace apenas dos años.
Tonkovic declaró a la NT que en esa maniobra el ejército destruyó 381 hectáreas de bosques, provocó erosión en miles de hectáreas y afirman que han desaparecido en los montes varios manantiales de agua limpia donde bebían los animales de caza.
Según la revista, los alcaldes piden que el gobierno o el ejército paguen el uso y el deterioro de tierras de propiedad pública. Su enojo aumentó al pagar el ejército a la empresa nacional forestal Srbija Sume una indemnización simbólica que ésta aceptó.
Los alcaldes lanzaron una teoría según la cual si los árboles en parte de la zona en la cual tuvieron lugar las maniobras militares son de la empresa forestal, la tierra es de los municipios. La revista puso énfasis sobre la nueva actitud lucrativa de las corporaciones públicas que en un par de años se olvidaron de la propiedad estatal y que ahora tratan de obtener beneficios, para autofinanciarse mejor.
Los alcaldes llamaron a geólogos y espeleólogos para probar que desaparecen los manantiales naturales del agua y que hay un deterioro generalizado en la zona de maniobras militares.
Según la revista, los alcaldes sostienen que el ejército tiene la intención de ampliar la actual base a 120 mil hectáreas para luego alquilarla a la OTAN y cobrar.