Previenen especialistas del IMSS contra la rinitis alérgica que es muy frecuente
Torreón, Coah.- Padecer catarros continuos, acompañados de comezón en la nariz, paladar, garganta, estornudos, congestión nasal, ojos llorosos e intolerancia a la luz, son los principales síntomas de rinitis alérgica, enfermedad crónica de las vías nasales, informó Regino Montoya Valdez, jefe de Servicio de Otorrinolaringología del Centro Médico Nacional Torreón del IMSS.
El ácaro que provoca ese padecimiento, dijo, es un parásito que por lo general vive en las habitaciones de la casa. La humedad y temperatura favorecen su reproducción, se alimenta de la queratina de la piel humana que diariamente se desprende para renovarse.
El ácaro se encuentra en las camas, colchas, alfombras, cortinas, almohadas, peluche y en todo lo que guarda polvo, lo que favorece la existencia de grandes cantidades de dermatofagoide.
Se estima que alrededor del 16 por ciento de la población urbana sana o aparentemente normal, puede llegar a desarrollar algún problema alérgico en cualquier etapa de su vida y manifestarse como rinitis, asma o dermatosis.
Otros desencadenantes de la rinitis alérgica son los irritantes del medio ambiente al interior del hogar, como aromatizantes y productos de limpieza, de tal forma que un niño que no padece en ese momento ningún mal, pero si tiene antecedentes familiares se acelera la aparición de esa enfermedad alérgica al convivir con personas que fuman.
Algunas medidas preventivas para evitar procesos alérgico, son eliminar de la alimentación los productos altamente alergénicos como pescado, huevo y cítricos, evitar contacto con animales de cualquier tipo y la acumulación desorganizada de objetos como libros, peluches, papel y todo aquello que favorezca la acumulación de polvo.
La lactancia materna, dijo, es una de las ayudas para evitar procesos alérgicos y evitar los alimentos con alto contenido alergénico como las comidas rápidas y enlatadas, ya que son ricos en aditivos, conservadores y colorantes que pueden acelerar la aparición de una alergia, sobre todo en las personas con riesgo.
Dijo finalmente que de cada diez caos por alergias que se atienden en ese servicio, siete son de rinitis y la edad más común es de los seis a 16 años, además de que el 30 por ciento de los pacientes pueden llegar a complicarse y sufrir asma.