SAN FRANCISCO, CAL.- Los Gigantes sacaron a relucir todo su arsenal ofensivo para triturar el jueves, 16-4, a los Serafines de Anaheim y quedar a una victoria de darle a San Francisco su primer título en una Serie Mundial.
Jeff Kent disparó dos jonrones, Benito Santiago remolcó tres carreras y Barry Bonds aportó un doble dentro de una cascada de 16 hits de los Gigantes en el quinto juego de la serie.
La serie se traslada ahora a Anaheim, con el sexto partido el sábado. En un duelo de lanzadores que fueron vapuleados en el segundo partido, Russ Ortiz tratará de guiar a los Gigantes al campeonato ante Kevin Appier.
San Francisco no ha celebrado un campeonato en las Grandes Ligas desde que la franquicia de los Gigantes dejó Nueva York en 1958 rumbo al norte de California.
Los Gigantes no se demoraron mucho para fabricar tres carreras en el mismo primer inning con dos hits y la complicidad del descontrol de Jarrod Washburn, quien regaló cinco bases por bolas en el juego, dos de ellas intencionales
Un doble de Bonds al derecho permitió a Kenny Lofton anotar la primera carrera y acto seguido Santiago remolcó a Jeff Kent con un elevado de sacrificio al bosque izquierdo.
Un Washburn sin brújula repartió entonces tres boletos consecutivos permitiendo entrar una carrera forzada.
Los Gigantes ampliaron la diferencia un episodio después, en el que Santiago otra vez hizo pagar caro a los Serafines por darle un boleto intencional a Bonds para llenar las bases.
El puertorriqueño Santiago disparó un sencillo por todo el centro del diamante remolcando dos carreras más y luego Reggie Sanders conectó un elevado de sacrificio que produjo la sexta.
Bonds ha recibido seis pasaportes intencionales en lo que va de la serie, mientras que Santiago batea para .545 (11-6) en la postemporada tras esa circunstancia, incluyendo nueve remolcadas.
Washburn apenas duró cuatro entradas, permitiendo seis hits e igual número de carreras y fue el pitcher derrotado.
Anaheim no se amilanó y de a poco fue recortando la brecha en la pizarra.
Troy Glaus coronó un racimo de tres carreras en la alta del quinto con un doble que rebotó en el muro del izquierdo.
Jason Schmidt, el abridor de los Gigantes, recetó cinco ponches en los primeros tres innings, pero no pudo pasar del quinto, siendo relevado por Chad Zerbe, quien retiró a Adam Kennedy.
Las esperanzas de los Serafines crecieron en el sexto, cuando el puertorriqueño Bengie Molina abrió con sencillo y el mexicano Benji Gil siguió con un doble. Molina anotó por una roleta de David Eckstein, pero Gil se quedó esperando remolque, luego que Darin Erstad murió en rola fácil al pitcher.
Con dos outs y Gil todavía en tercera, el dominicano Félix Rodríguez entró a relevar y sus tres primeros lanzamientos fueron bola. Tim Salmon, sin embargo, le bateó al cuarto ofrecimiento y fue puesto fuera en una roleta a la antesala.
Pero la respuesta de los Gigantes no se hizo esperar y en la baja del sexto Kent —quien no había tenido buena suerte en la madera hasta ahora— disparó el primero de sus dos jonrones, depositando la pelota en las tribunas del izquierdo para poner el marcador 8-4.
San Francisco sentenció la victoria con un ramillete de cuatro anotaciones en el séptimo, en el que Lofton sonó un doble productor de dos y Kent pegó su segundo cuadrangular de la noche, otra vez con Rich Aurilia en circulación.
Con el partido definido, los Gigantes anotaron cuatro más para el trámite en el octavo, con Aurilia impulsando tres con un jonrón