Las empresas del ramo forestal aprovechan “el receso” en sus operaciones, que les genera de manera natural cada temporada de lluvias por deterioro de los caminos de acceso a las zonas de extracción de la materia prima, para dar vacaciones a sus trabajadores. Y pese a que la mayoría prevé este tipo de situación y completar sus inventarios de madera en rollo, no es suficiente para evitar que el 90% de las factorías estén paralizadas a causa del desabasto.
Y aunque la situación por desabasto de materia prima como consecuencia de las lluvias, que además de ocasionar daños a los caminos de transportación también impiden la explotación de la madera en rollo, es recurrente, y la mayoría de los industriales lo prevé al llenar sus almacenes; el tiempo de duración y la magnitud de los fenómenos climáticos en esta temporada fue extraordinario, al no registrarse volúmenes de precipitaciones pluviales similares en los últimos 20 años.
El presidente de la Asociación de Industriales Forestales de Durango, Jesús Hugo Mancinas Alemán, señaló que a pesar de la difícil situación que enfrentan los empresarios, hay conciencia de que las precipitaciones pluviales extraordinarios, son más benéficas que perjudiciales.
A decir de Mancinas Alemán, desde hace más de 20 años que el bosque no recibía volúmenes de agua pluvial, como los que se registran en la actual temporada, lo cual habrá de traducirse en la recuperación de las zonas forestales, y sobre todo prever los brotes de los incendios en el bosque, ya que cuando hay sequedad el fuego surge con mayor facilidad, además de que se esparce con mayor rapidez y dificulta las actividades de combate.
Y aunque las industrias estén paralizadas por el desabasto de materia prima, en los empresarios hay conciencia de que las lluvias que se registran en las partes altas de la sierra son benéficas para que las zonas forestales se regeneren.
Dijo que desde cualquier punto de vista, la humedad se traduce en beneficios integrales para el bosque, y por ende a futuro también se reflejará en la industria, que es otro de los eslabones de la cadena productiva que concurren al sector forestal.