La Jornada
México, DF., Si realmente hay interés en esclarecer la muerte de Digna Ochoa y Plácido la línea de investigación que debe ser profundizada es la del Ejército, coincidieron el jefe delegacional de Tlalpan, Gilberto López y Rivas y el general José Francisco Gallardo, al encabezar un homenaje en memoria de la defensora de los derechos humanos.
Al cumplirse el primer aniversario luctuoso de Digna Ochoa, y en el parque que lleva el nombre de la luchadora social, López y Rivas, en compañía de diversos funcionarios de su demarcación, del general Gallardo y ante vecinos de la colonia Ampliación Miguel Hidalgo, confió en que “pronto” se emita una “respuesta profesional y despojada de toda politización del caso” respecto a la muerte de la abogada veracruzana.
En entrevista, puntualizó que en el “crimen” de Digna Ochoa lo primordial es indagar la “eventual participación de los militares” y agregó que la fiscalía especial, encabezada por Margarita Guerra y Tejada no debe dejar de tomar en cuenta la “persecución de la que fue objeto y las amenazas que recibió” Ochoa. Especificó que de las tres líneas de investigación actuales a la que debe dársele especial seguimiento es a “ese ámbito que parece ser tabú”, el de los militares. Ello porque “Digna tocó muchos puntos relacionados con los grupos que operan en el clandestinaje; los grupos paramilitares; tocó muchos casos en donde el Ejército ha estado involucrado”.
En este contexto recordó que fue Digna Ochoa fue quien “preparó la denuncia que yo presenté sobre la existencia de grupos paramilitares en Chiapas” y abundó que la existencia de grupos de este tipo no se termina con meter a la cárcel a unos cuantos integrantes de Paz y Justicia; “lo importante es saber cómo el Ejército está involucrado en el sostenimiento de estos grupos, ¿quién les dan la preparación militar?, ¿quién les da las armas?¿cómo logran un entrenamiento y quién les brinda el apoyo logístico y el de inteligencia?”, preguntó. En una de las colonias más populares de Tlalpan, el jefe delegacional se congratuló de que la memoria de Digna Ochoa esté presente y se empiece a “enraizar” en estas comunidades. Por su parte, el general Gallardo señaló que “si sinceramente hay intención de abrir los espacios de investigación, se deben agotar todas las líneas, principalmente las que apuntan hacia el Ejército”.
Al descartar que el caso pueda ser cerrado bajo la hipótesis de que fue suicidio, esto porque “todos sabemos que eso no es cierto”, se negó a hacer algún señalamiento puntual respecto a la posible responsabilidad del Ejército y arguyó que todos los elementos que se podían aportar sobre el particular fueron otorgados a la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), los cuales ya están asentados en actas.