TORREÓN, COAH.- Existe interés del Gobierno Municipal en reubicar de aéreos a subterráneos, los tendidos de energía eléctrica, fibra óptica, teléfonos, semáforos, televisión por cable y alumbrado público, como parte de las acciones para modernizar y mejorar la imagen urbana del Centro Histórico.
Para ello, se requiere aplicar una inversión estimada en el orden de los 6 millones de pesos e involucrar a las empresas e instituciones correspondientes, así como a los dueños de los negocios ubicados en el entorno.
Así lo revela un detallado estudio técnico que fue realizado por la Comisión Federal de Electricidad, CFE, a petición expresa del actual ayuntamiento y al que tuvo acceso este diario.
La propuesta consta de tres partes: Costo de la obra, área sobre la cual se trabajaría y posibles mecanismos de financiamiento.
El proyecto de referencia, se pretende plantearlo a directivos de la Cámara de Comercio a fin de que lo analicen y lo consideren como algo factible de realizar en el corto plazo.
Se destaca que el apoyo del comercio organizado, para impulsar esta obra que indudablemente daría un cambio radical al rostro de la zona centro, sería decisivo.
De hecho, se bosquejan también ampliamente los beneficios de realizar esta obra, máxime si se logra concretar la construcción del estacionamiento subterráneo en la Plaza de Armas y que abarcaría más de una manzana.
Se anota en el documento que el sistema de trabajo, sería el conocido como “craking’’ similar al que se utilizó en la introducción de la nueva tubería de agua potable que hizo el Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento, es decir, sólo se abrirían especie de ventanas en las esquinas de las calles con lo cual las molestias serían menores.
El área donde en una primera etapa se trabajaría para despejar de la “maraña’’ actual que representan los cables por todos lados es de la avenida Matamoros a la Presidente Carranza entre las calles Cepeda y Valdés Carrillo.
De lo que se suprimiría en el espacio señalado figuran: 67 postes, 11 transformadores, 1 mil 075 metros de media tensión, 1 mil 700 metros de baja tensión, 1 mil 097 “acometidas’’, que son las líneas colgantes mediante las cuales se suministra el fluido de energía eléctrica de los postes a las casas o negocios.
Técnicamente se supone que a través de la apertura de ventanas en las esquinas se introduciría un gran tubo donde CFE, empresas de telefonía, semáforos y televisoras que se manejen por cable, introduzcan sus redes en forma conjunta.
En lo que corresponde a la forma de financiar el cambio de cables, una alternativa podría ser con dinero procedente de la Alianza Coahuilense dentro del programa de acciones del 2003.