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Política exterior debe tener sustento global

PRINCIPIOS

?México, dentro de un mundo globalizado, no puede darse el lujo de aislarse?.

ANDRÉS ROZENTAL

EMBAJADOR MEXICANO

SUN-AEE

México, D.F.- La política exterior debe tener un sustento básico en los intereses del país, y en el contexto mundial no puede ser capricho ni invento de un gobierno, de una administración, de un presidente, de un canciller o de un diplomático, asegura el embajador Andrés Rozental.

Hoy es presidente del Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales, es diplomático no activo por el momento, y además es medio hermano del secretario de Relaciones Exteriores, Jorge Castañeda. En entrevista, Rozental afirma que México, dentro de un mundo globalizado, no puede darse el lujo de aislarse de éste por anteponer sus principios, y por ello desconocer el contexto mundial.

Refiere que la relación con Estados Unidos, ante todo, está basada en los intereses de México; Cuba, asegura, no representa un dolor de cabeza para la nación azteca, sino más bien, un régimen estancado en la historia.

En Europa, reconoce que México y el presidente Vicente Fox gozan de gran prestigio, y critica que el gobierno mexicano, en su política exterior, se olvide de regiones como África.

Rozental es claro al defender que si bien la política exterior de México se basa en la actualidad en los mismos principios que marca la Constitución mexicana, es claro que existe un mundo en el que, sin perder el sentido de la soberanía y la autodeterminación de los pueblos, es necesario tomar parte.

"México está preparado para tomar parte en cualquier tema", dice enfático y convencido. "Sin lugar a dudas, México tiene un instrumental grande de experiencias, de recursos humanos, de diplomáticos, de políticos que han participado muy activamente y con mucho éxito en temas internacionales".

Agrega que el país debe hacer gala del "enorme" prestigio del que goza a nivel mundial, mismo que no se ve mermado por el hecho de tomar posición en los asuntos multilaterales. Al contrario, subraya, la gente espera que México esté a la altura de lo que es el país en su tamaño y en su circunstancia.

El tema Iraq, en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, es un ejemplo recurrente para advertir que México debe estar en la esfera mundial. Advierte que México jugó un papel importante para evitar que el unilateralismo de Estados Unidos, se impusiera para un posible ataque.

"El prestigio de México, a raíz de esto, se vio muy enaltecido, aunque aquí en México muchos dijeron que estaba mal. Nosotros, es claro, no vamos a poder impedir que una potencia como Estados Unidos, a la postre, cuando tome la decisión, haga lo que quiera hacer; lo que sí podemos hacer, es acercar posiciones para evitar que se haga", indica.

Ante esto, Andrés Rozental subraya que la política exterior, y lo que pasa en el mundo, son un proceso dinámico y no estático.

No se puede decir que la política exterior será de una manera en cada caso, y es entonces, que entra el debate de los principios y las acciones.

"Los principios son guías, son principios rectores que orientan la generalidad de cómo México debe contraponerse", asevera, "pero no dan soluciones para casos específicos como Iraq, o como la situación migratoria con Estados Unidos, eso se tiene que resolver sobre la marcha y de conformidad, a mi juicio, los intereses de México, que es el tema más importante".

De la relación con Estados Unidos, en concreto, destaca que se basa en intereses, los de México, son claros: comercio, economía, inversión, vecindad, migratorios, salud pública y todo lo que es la interacción cotidiana en la frontera. "Pero hay puntos en los que no estamos, ni estaremos de acuerdo, simplemente porque somos países distintos".

Y enuncia, que a pesar de las críticas por no tener aún un acuerdo migratorio, existen avances que un grupo de gente, que estuvo en el poder diplomático, no logró hacer, y que hoy se dedican a la "vociferar".

De Centroamérica, América Latina y El Caribe, Andrés Rozental señala que México no se puede olvidar, pues existe un lazo histórico, cultural y lingüístico que une. Y a pesar de que en la actualidad, América Latina es una zona convulsa, existe un propósito que se debe cuidar, y es que la democracia, se mantenga, fortalezca y tenga suficientes satisfactores.

Con relación a Cuba señala: "No creo que represente un dolor de cabeza, México no tiene grandes intereses económicos en Cuba. Yo creo que representa, para muchos mexicanos, un régimen estancado en la historia, que en su momento fue ejemplar".

La política exterior de México, en los dos años del gobierno de Vicente Fox, está basada en los mismos principios, en las mismas formas de defender los intereses del país, pero con un activismo mayor y un deseo de posicionar a México en la comunidad internacional, asevera.

Pero "como toda obra humana, la política exterior es perfectible, hay temas que preocupan, y México no tiene una política real hacia otras partes del mundo como África".

Aún así, manifiesta que México participa en el contexto internacional con un peso mayor del que representa su realidad, desde el punto de vista de su poderío.

"México no es un poder militar, no tenemos ejércitos, no tenemos bombas, no podemos hacer tronar nuestros chicharrones como nos hubiera gustado en algunos casos, pero tenemos lo que el canciller llama el poder suave: nos respetan", remat

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