GÓMEZ PALACIO, DGO.- Las familias que invadieron el bordo de protección del lecho seco del Nazas rechazaron la posibilidad de aceptar lotes de terrenos de las reservas municipales, aunque a cambio obtuvieron la ayuda material para levantar los jacales sobre la franja de propiedad federal.
El grupo de 120 familias precaristas encabezado por Carlos Martínez Hernández se negó a hacer la solicitud formal de terrenos disponibles en las reservas del ex ejido Filadelfia, bajo el argumento de que la mayoría de ellos trabajan en las factorías del Parque Industrial, y que reubicarse a aquel sector les dificultaría el traslado a sus empleos.
Además, dijeron que casi todos pertenecen a familias ya instaladas en las colonias El Consuelo, Ricardo Flores Magón y Ampliación Flores Magón, y que el terreno del bordo de protección es el más propicio para quedarse.
Carlos Martínez pidió a nombre de sus representados, el apoyo de la autoridad municipal para levantar los jacales en los lotes de terreno que ya se autoasignaron, motivo por el cual se ordenó a la Dirección de Patrimonio y Adquisiciones levantar una lista de los futuros beneficiarios con cartón y plásticos.
Según el dirigente, hasta el día de ayer no habían tenido conocimiento de ninguna reacción en su contra por parte de la Comisión Nacional del Agua; únicamente el lunes se presentaron dos funcionarios de la dependencia a tomar conocimiento de la ocupación del bordo.
LA INVASIÓN
Habitantes de las colonias El Consuelo, Ricardo Flores Magón y Ampliación Flores Magón, invadieron desde el pasado fin de semana una franja de terreno del bordo de protección del río Nazas que pertenece al Gobierno Federal, argumentando necesidades de espacios para vivienda.
· Son 120 familias las que demandan espacios para vivienda, pero a la vez rechazan solicitar los lotes de terrenos destinados a satisfacer esas necesidades, correspondientes a las reservas municipales, argumentando que la mayoría trabaja en las factorías cercanas, en el Parque Industrial.
· Los precaristas se autoasignaron lotes de terreno de seis metros de frente por ocho o diez de fondo, en una extensión superior a los 800 metros sobre el bordo de protección del Nazas.
· La Comisión Nacional del Agua fue notificada de la invasión e iniciará un procedimiento legal contra los ocupantes del terreno.
· La autoridad municipal no justificó la irregularidad, pero a la vez les apoyó con cartón y plásticos para levantar los jacales.
· Actualmente, el Municipio de Gómez Palacio dispone de 77 hectáreas de terreno para satisfacer las demandas de espacios para vivienda, en las reservas del ex ejido Filadelfia.
· Otras 20 hectáreas ya son ocupadas por cerca de 500 familias reubicadas y que se encontraban en situación irregular.
· Se gestiona ampliar las reservas territoriales mediante la expropiación de 94 hectáreas pertenecientes al ejido El Fénix.
INVESTIGACIÓN: El Siglo de Torreón.
Dijo que las familias demandan terrenos pero a la vez rechazan trasladarse a las reservas territoriales del municipio, pues se alejarían más de las familias y tendrían problemas para acudir a sus centros laborales.
La ayuda fue humanitaria: Meraz
El director de Desarrollo Rural y Reservas Territoriales, Raúl Antonio Meraz Ramírez, dijo que el apoyo otorgado por el Municipio fue de carácter humanitario y que esto no compromete a la administración a tolerar una situación irregular.
A los invasores, refirió, se les recalcó el hecho de que están ocupando un terreno que está en manos de la dependencia federal y por lo tanto están fuera de la Ley, además del riesgo de verse afectados si se llegan a presentar lluvias que causen inundaciones o repercutan en el lecho del río Nazas.
El funcionario dijo que el Municipio no justifica la invasión, pues existe terreno suficiente en las reservas y los argumentos de que éstas se encuentran alejadas de la ciudad no son válidos.
La autoridad cumplió con su obligación de notificar a la CNA de la invasión, y deberá ser dicha instancia la que proceda en consecuencia; el Municipio, dijo, está a la espera de los resultados del procedimiento legal iniciado por la dependencia y será respetuoso de cualquier determinación y asumirá su responsabilidad.