“Si un hombre empieza con certidumbres, termina con dudas; pero si se contenta con dudas, terminará con certidumbre.”
Francis Bacon
Si el presidente Fox prometió que no privatizaría la Comisión Federal de Electricidad, ¿por qué la está privatizando?
La iniciativa del presidente Fox no privatiza nada: es decir, no vende ningún activo de la Comisión Federal de Electricidad o de a Compañía de Luz y Fuerza del Centro. La iniciativa mantiene la situación actual, que permite la inversión privada en plantas generadoras bajo la supervisión del Estado, y añade la posibilidad de que estas plantas puedan venderle electricidad directamente a los grandes consumidores.
¿Ya es legal en México la inversión privada en generación de electricidad?
Desde 1992, cuando se promulgó una nueva Ley sobre el Servicio Público de Electricidad, más del 90 por ciento de toda la nueva generación de electricidad en el país ha sido producto de inversiones privadas.
Si la iniciativa del Presidente no cambia sustancialmente la situación actual, ¿por qué es necesario cambiar la Constitución?
Una decisión de la Suprema Corte de Justicia en abril puso en tela de duda la legalidad de las inversiones privadas que se han hecho y las que se puedan hacerse en el futuro bajo el amparo de la Ley de Electricidad del 92.
¿Es verdad que la crisis energética de California fue producto de la privatización de la electricidad en ese estado?
No. La generación de electricidad siempre ha sido privada en California y en la mayor parte de Estados Unidos. Dos factores contribuyeron a la crisis de California. Uno fue el bloqueo de los grupos ecologistas a la construcción de nuevas plantas generadoras en California durante años. Y el otro la decisión de liberar los precios al mayoreo, dejando los de menudeo bajo control gubernamental, lo cual quebró a las empresas distribuidoras.
Si la privatización es la solución, ¿por qué Argentina agoniza?
Porque durante mucho tiempo el gobierno argentino tuvo un déficit de presupuesto demasiado grande. El déficit se traduce necesariamente en deuda. Y la deuda pública argentina se volvió impagable. Las privatizaciones tuvieron poco o nada qué ver. Quizá el único problema es que el ingreso de las privatizaciones se usó en gasto corriente y no en inversión o en reducir la deuda pública. Pero la crisis argentina habría llegado tarde o temprano, con o sin privatizaciones, porque ningún país puede vivir indefinidamente de prestado.
¿Es verdad que la privatización o la apertura a la inversión privada lleva inevitablemente a mayores precios de electricidad?
No. La experiencia ha sido exactamente la contraria. La inversión privada ha llevado a una mayor eficiencia en la producción y por lo tanto a una mayor oferta de electricidad. En países como Gran Bretaña, España y Chile, los precios han bajado entre 25 y 40 por ciento.
¿Es verdad que la privatización o la apertura a la inversión privada de la electricidad ha resultado un fracaso en todos los países del mundo en que se ha intentado?
No, todo lo contrario. Ninguno de los países que ha seguido el camino de la apertura se ha echado para atrás. Ninguno está nacionalizando su industria eléctrica. Por el contrario, los países que no han abierto su electricidad lo están haciendo. En China se está llevando a cabo el mayor programa de apertura del mundo. Incluso Francia, que durante mucho tiempo se resistió, está iniciando ya un programa para abrir la electricidad a la inversión privada.
¿Es verdad que el escándalo de Enron demostró que la energía no debe dejarse nunca en manos privadas?
No. La mayor parte de la energía del mundo es manejada con honestidad y eficiencia por empresas privadas. Ni el escándalo de Enron demuestra que una empresa privada no puede manejar energía, ni el de Pemex que una empresa pública puede manejar petróleo.
¿Es cierto que los países más soberanos son los que mantienen la electricidad en manos de un monopolio gubernamental?
No. Los países más soberanos, los que pueden defender mejor los intereses nacionales frente a los extranjeros, son los que generan mayor prosperidad y le dan un mejor nivel de vida a sus habitantes. Y son también los que mayores facilidades le dan a la inversión privada.
¿Se pone en riesgo la soberanía nacional con la inversión privada —nacional o extranjera— en electricidad?
Por el contrario, se fortalece al producir más electricidad y más barata lo que se traduce en más inversión, empleos y prosperidad.
Nacionalización
La industria eléctrica fue “nacionalizada” el 27 de septiembre de 1960 por el presidente Adolfo López Mateos. El proceso no se hizo por expropiación, como en el caso del petróleo, sino por la compra gradual de empresas privadas que operaban en el país.