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Prenden fuego a cabañas

Por: Javier P. González Muruato

EL SIGLO DE TORREÓN

EJIDO NUEVO GRACEROS, DGO.- Enardecidos por el asesinato de un pescador de este poblado, los familiares y vecinos saquearon y quemaron varias cabañas del lugar donde localizaron el cadáver, un centro recreativo propiedad de Marco Antonio Dacaret Habib.

Los hechos ocurrieron la tarde y noche del jueves, cuando preocupados por la extraña desaparición de Francisco Antúnez Hernández, desde la noche del domingo anterior, decidieron buscarlo en los alrededores y cerca de las 19:30 horas de antier lo encontraron a un costado de las cabañas, ya descompuesto y semienterrado con grandes piedras.

Juana Martínez, esposa de Francisco, dijo a El Siglo de Torreón que la noche del domingo, luego de cenar, su esposo salió al patio de la casa a regar unas flores, poco antes de las 24:00 horas, pero ya no volvió nunca.

A la mañana siguiente le comunicó la noticia a los padres de Francisco y poco después todo el pueblo estaba enterado de la desaparición del hoy occiso, pero fue hasta el martes por la tarde que se organizaron y comenzaron la búsqueda.

Los habitantes sospechaban que algo malo le pudo haber pasado, ya que en días anteriores Francisco había discutido con un sujeto al que sólo conocen como “El Negro”, originario de Sinaloa y empleado de Dacaret Habib, y sabían que era un tipo de cuidado, ya que siempre andaba armado y en ocasiones anteriores, junto con otro individuo apodado “El Eddy”, había golpeado a otros habitantes.

Luego de buscar e indagar por los alrededores, el jueves un grupo se internó en el área donde se localizan las cabañas y al percibir el característico olor de un cuerpo descompuesto, pudieron encontrar el cadáver en un pozo de menos de un metro de profundidad y semi-cubierto con piedras.

Rápidamente la mala noticia fue conocida por los aproximadamente 800 habitantes y se dio parte a las autoridades, en tanto que muchos de ellos se reunieron en el lugar del crimen para decidir qué hacer.

Poco después llegaron varias patrullas de la Policía Ministerial de Gómez Palacio, junto con un agente del Ministerio Público y personal del Servicio Médico Forense, quienes se hicieron cargo de levantar el cuerpo y trasladarlo para practicarle la necropsia de rigor.

El cadáver presentaba una herida producida por arma de fuego, con orificio de entrada en el costado izquierdo que le afectó el corazón, lo cual le causó la muerte casi instantánea.

Dacaret fue localizado en una de las cabañas por los policías y se lo llevaron en forma rápida, pues la gente comenzaba a enardecerse y temían que fuera linchado.

Al ver que se llevaban a quien consideraban culpable de la muerte de Francisco, alguien propuso a gritos quemar las fincas y todos asintieron, pero antes algunos aprovecharon para sacar objetos de valor, según la versión de uno de los testigos.

Poco después las cabañas estaban envueltas en llamas que alcanzaban varios metros de altura, lo que calmó un poco los ánimos de los habitantes del poblado, quienes clamaban justicia por el asesinato.

¿Cómo empezó la historia?

Cuentan los habitantes que hace poco más de 10 años, llegó Marco Antonio Dacaret y comenzó a fincar unas cabañas en una franja cercana al río Nazas que le fue concesionada, donde levantó un centro recreativo y construyó incluso un puente sobre el río, lo que en primera instancia benefició al pueblo, pues creó fuentes de empleo, pero no sabían lo que les esperaba.

Los vecinos afirman que desde que llegó Dacaret comenzaron a suceder cosas extrañas. No pocos jovencitos y otros trabajadores se hicieron drogadictos, de mariguana y cocaína, cuando anteriormente no les había ocurrido ese problema.

En reiteradas ocasiones habían denunciado esa situación a las autoridades, ya que incluso por cualquier cosa golpeaban a los muchachos, pero aseguran que nunca les creyeron, además que los policías son amigos de Dacaret, a quien acostumbraban ir a saludarlo y en ocasiones a tomar cerveza.

“Cuando han puesto retenes aquí cerca para detectar droga, el mismo Dacaret se encarga de llevarles la comida o cena a los policías. Es que son sus amigos y estamos seguros que no lo van a castigar, pero que no se vuelva a parar por aquí, porque entonces sí...”

Exigen justicia

Francisco Antúnez dejó en el desamparo a su esposa, Juana Martínez, de 25 años y tres pequeños hijos: Francisco Javier, Juan Salvador y Laura Yadira, de 7, 4 y 2 años.

Familiares y vecinos exigen justicia, que pongan tras las rejas al autor intelectual y material del asesinato, así como la indemnización de la familia desamparada, para lo cual proponen que los bienes de Dacaret pasen a ser propiedad de la viuda y sus hijos.

Las investigaciones

Desde temprana hora de ayer retomaron las indagaciones elementos de la Policía Ministerial al mando del agente investigador del Ministerio Público, Óscar Menchaca Lara, quien informó que como presuntos responsables aparecen “El Negro” y “El Eddy”, de quienes presumiblemente no se conocen sus nombres, aun cuando son empleados de Dacaret, quien ya declaró pero su versión extrañamente no fue dada a conocer.

En el lugar de los hechos se encontraron tres armas de fuego; dos rifles calibre 22 y una escopeta calibre doce, las cuales fueron decomisadas al igual que otras más que les encontraron pocas horas después a Leobardo Salcido Pacheco y Martiniano Soto Valles, empleados también de Dacaret y con domicilio en Torreón.

Las armas encontradas a los detenidos son: un rifle calibre 22, una pistola 9 mm Lugger tipo Uzi, otra del mismo calibre Beretta, una calibre 22 marca Star y otra 45 tipo Colt. También aseguraron 112 cartuchos de diversos calibres.

Al filo de las 14:00 horas de ayer, la búsqueda de los ministeriales rindió frutos y lograron encontrar la pistola calibre .38, con la cual supuestamente se dio muerte a Francisco, ya que coincide con el impacto.

Algunos hombres mencionaron que los policías también buscaban droga o dinero, pues no permitieron que nadie se acercara y antes que se marcharan todos los elementos, salió una camioneta de la Ministerial con objetos en la caja.

Sobre la situación de Dacaret Habib, el agente investigador del Ministerio Público no acertó a definir su paradero, sólo dijo que está a disposición de esa instancia y probablemente sea consignado al Ministerio Público Federal.

-¿Está detenido?.- No, contestó Menchaca Lara.

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