Sumo cuidado se debe tenera la hora de realizar el procedimiento
En algunos estudios publicados, se pueden apreciar problemas de diversa índole en el 17 por ciento de las personas que se han puesto piercing, y menos problemas en los casos de tatuajes.
Por ejemplo, entre los problemas menores que se atribuyen al piercing están:
-Alergia al material, por ser metales derivados del níquel y no metales pesados como pueden ser el titanio o niobio, etcétera.
Las alergias al níquel y bisutería pueden aparecer en un 45 por ciento de la población; por ello debe de ser un tema a prevenir.
-Infecciones por bacterias, locales que suelen ser tratables con antibióticos, pero es muy frecuente el rechazo y la necesidad de volver a quitar el piercing.
Entre los problemas mayores destacan:
-La vía de aplicación y el método entrañan ciertos riesgos de transmisión de enfermedades víricas, hepatitis B, C, D, y SIDA, aunque por el momento no se han descrito casos comprobables.
Medidas de Prevención
-Los alérgicos al níquel o bisutería evitar ponerse piercing.
-Evitar ponerse piercing las personas con acné moderado o grave.
-Comprobar las normas básicas de higiene y esterilidad.
-Comprobar el contenido del material.
-Mantener una higiene adecuada de la zona.
Problemas menores en los tatuajes:
-Infecciones. Si la molestia inicial continúa después de la cicatrización, hay que consultar a un dermatólogo.
-Alergias. En forma de eccema de contacto, la piel se inflama, produce vesículas, exuda y pica, no desaparece hasta eliminar el causante.
-Hay casos de alergia a los colorantes (tatuaje) o a los metales y demás materiales utilizados: El sulfato rojo de mercurio se utiliza como pigmento rojo en tatuajes y en pinturas artísticas.
-Metales níquel, cromo (dicromato potásico) en tatuajes verdes, cadmio (Amarillo)
-Sales de cobalto en tatuajes azules.
-Óxido de hierro, tonos ocres.
-Cuidado con los colores blanco y beige, llevan en su composición óxido de titanio y óxido de zinc.
-Otros pigmentos orgánicos, azoicos y derivados de plantas dan alergia en ciertas personas.
Problemas mayores en los tatuajes:
Si el material utilizado por el tatuador no es estéril y de un solo uso, existe peligro de contraer enfermedades infecciosas. Se destaca que también es posible que se trasmita el virus de la hepatitis B y C, además de otras enfermedades infecciosas, si el material usado no está esterilizado.
No se recomiendan los tatuajes y el piercing a las personas que padecen diabetes, insuficiencia renal o enfermedades cardíacas congénitas: una eventual reacción alérgica sería peligrosa.
Otras complicaciones:
-Infección.
-Dispersión de pigmentos (migraciones).
-Defectos de técnica.
Medidas de Prevención
1. Comprobar la composición de los colorantes.
Según la legislación vigente, los pigmentos para micropigmentación deben cumplir los siguientes requisitos:
-En el etiquetado debe ir especificada la composición que debe ser conocida: lote, fecha de caducidad, empresa y fabricante.
-Propiedades químicas:
-No ser tóxicos.
-No provocar irritación de los tejidos.
-Estériles de origen.
-Constituidos por ingredientes inertes (óxido de hierro).
-No cambiar de densidad.
-Partículas de tamaño superior a 6 micras, para que los macrófagos tengan más dificultad al ingerirlas y permanezcan más tiempo en la zona tratada.
-Poca solubilidad (mayor estabilidad).
2. Hacer con ellos pruebas de sensibilidad previamente con un alergólogo. A diferentes metales, sales y pigmentos orgánicos.
3. Comprobar la higiene del material a utilizar.
En el formulario previo de registro de un cliente que se quiera poner un piercing o un tatuaje debe quedar registrado:
-Si tiene Diabetes.
-Si tiene o en su familia hay hemofilia.
Si tiene o ha tenido reacciones en la piel con jabones, desinfectantes, etcétera.
-Si tiene alergia a la bisutería o a los metales.
-Si ha tenido problemas de epilepsia o similares.
-Si toma medicación anticoagulante.
Además se deben tener los datos personales del cliente, consentimiento de aceptación por escrito. Si es menor de edad un consentimiento del cabeza de familia o tutor.
Se debe utilizar material desechable de un solo uso, con los adecuados contenedores de material contaminado para su eliminación posterior. El material no desechable debe de esterilizarse en una cámara apropiada a 121 grados centígrados durante 15 minutos.
Los materiales que no puedan ser esterilizados de esta forma, deben ser lavados y mantenidos en un líquido esterilizador (clorhexidina o alcohol de 70 grados).
La manipulación del material se debe realizar con guantes desechables estériles.