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México, D.F.- Las obras en el Centro Histórico se prolongarán otros tres días más, aseguró el jefe de Gobierno Andrés Manuel López Obrador, quien señaló que estarán concluidas el 18 de noviembre. “Vamos a dejar unos días más para que fragüe bien el concreto”, dijo. A tres semanas de vencer el plazo para que termine los trabajos de reparación del drenaje y de la instalación de cableado de los servicios de la luz y telefonía, el político tabasqueño, por segunda ocasión, prolongó el fin de las obras en esta zona de la cuidad de México.
La primera ocasión fue el mes pasado cuando comentó que se ampliaría hasta el 15 de noviembre y no a finales de octubre, tal y como lo había definido desde un principio el Fideicomiso del Centro Histórico. La segunda vez fue hoy.
También rechazó tajante que no haya medidas de señalización que garantice la seguridad de los transeúntes. Sin embargo, en las banquetas de Isabel La Católica, Madero, Simón Bolívar y Allende hay zanjas apenas cubiertas por tablas y sin ningún aviso de precaución.
Aceptó que las obras que se realizan son molestas para las personas y comerciantes que diariamente caminan por este lugar. Pero negó que falten señalamientos que eviten accidentes.
“Desde luego se abrieron todas las calles, no es poca cosa intervenir en el Centro Histórico para resolver problemas de agua, de drenaje, de teléfono, luz, gas y todas las instalaciones subterráneas”, sostuvo. En su conferencia matutina, López Obrador pidió un poco de paciencia, ya que hubiera sido muy irresponsable colocar los pisos y banquetas y no arreglar la infraestructura hidráulica y el cableado de los servicios.
“Es como si se hubiese bombardeado el Centro Histórico, pero afortunadamente ya se va a resolver”, consideró.
Desde su punto de vista, los problemas que se suscitan en la zona son normales, debido a que es una obra muy grande. En un recorrido realizado por esta zona, se detectó que hay tablas de madera en mal estado que tapan las zanjas del piso, las máquinas que sirven para escarbar trabajan prácticamente al paso de los transeúntes, en algunas calles como 5 de Mayo solamente hay mallas ciclónicas que protegen al peatón pero hay tramos donde no existen.
En los cruces de Bolívar y Madero hay un boquete de unos tres metros de profundidad sin ninguna advertencia; lo mismo ocurre en Madero e Isabel La Católica. Recordó que los comerciantes y vecinos están participando en las obras de remodelación.
En otro orden, y ante los rumores de que René Bejarano renunciará a su cargo de secretario particular del jefe de gobierno, López Obrador rechazó opinar sobre este asunto.
Dijo que en el caso de que se diera esta situación, en su momento externaría su opinión.