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LOS ÁNGELES, ESTADOS UNIDOS.- El sueño de que una película mexicana gane el Oscar está muy próximo a ser real, afirmó Carlos Carrera, luego de enterarse que la cinta El Crimen del Padre Amaro representará a México en la entrega de este certamen.
"Estoy muy contento que la Academia Mexicana la haya escogido. Aún hay que esperar porque hay mucho camino. Es el primer paso pero habrá que ver que más traerá y por ahora sólo nos queda soñar", dijo Carrera.
En una rápida visita de promoción que realizó a México, el director de la cinta mostró indiferencia ante los grupos católicos de Estados Unidos que han empezado a protestar por la exhibición de El Crimen del Padre Amaro.
La cinta que ha generado controversias por el tema que aborda, el próximo 15 de noviembre tendrá un estreno limitado en 50 cines de las principales ciudades con mayor población latina en Estados Unidos.
"Deberían de aprender de la lección de México. Allá muchos grupos conservadores protestaron incluso hasta sin haberla visto, pero con sus acciones sólo provocaron que más gente fuera a las salas", señaló.
"Es una cinta ficticia. Sabemos que hay sacerdotes buenos y malos. Pero hay que reconocer que todo lo que pasó en la película ha pasado en la realidad y nada de esto es mentira", manifestó.
Cifras extraoficiales señalan que la cinta en México, recaudó más de tres millones 200 mil dólares y con ello se ubicó como la más taquillera en toda la historia del cine en ese país.
Con un costo de producción de un millón 800 mil dólares, esta es una cifra irrisoria en comparación con las grandes producciones hollywoodenses que en promedio llegan a gastar alrededor de 50 millones de dólares.
Al retomar la elección para representar a México en la contienda por el Oscar a la mejor cinta extranjera, expresó "daba por hecho que seríamos los elegidos, porque la academia mexicana es muy democrática".
Ello, precisó, "porque ya se nos había seleccionado para representar a México en el certamen de los premios españoles Goya y a partir de ese momento sentí que el boleto para el Oscar lo teníamos ganado".
La Academia de Arte y Ciencias Cinematográficas anunciará el 11 de febrero de 2003 las películas que resultaron seleccionadas para competir por el Oscar, y entregará las estatuillas doradas el 23 de marzo del próximo año en el Kodak Theatre de Hollywood.
Carrera dijo que estaba satisfecho con el resultado de la película, aunque precisó que le hubiera gustado ver la transición del sacerdote de bueno a malo.
En general la película me gustó como quedó. Hay el sentimiento de que la película y la historia funcionó a pesar de que carecen de tiempos rápidos de edición, pero el interés se mantiene como algo intangible, dijo.
"Siempre me ha gustado contar varias historias en una película. Contar la vida de cada uno de los personajes y en este caso se tuvo mucho que resumir y concretar a algunos personajes que estaban en la novela".
La historia de la película se basó en la novela homónima costumbrista escrita en Portugal en 1875 por José María Eca de Queiroz, pero la cinta se adaptó a un pueblo mexicano de los tiempos actuales con guión del reconocido escritor Vicente Leñero.
“En mi objetivo estaba el contar todas las posiciones de la iglesia. Queríamos personalizar cada una de las historias y hablar de distintos enfoques y posiciones alrededor de la iglesia", resaltó.
Al principio, incluso antes de que saliera la cinta, Carlos Carrera explicó que algunas organizaciones conservadoras como ProVida manifestaron su descontento por la película.
"Se nos fueron encima muchos sectores conservadores como ProVida. Hicieron una campaña para prohibirla pero cuando vieron la respuesta de la gente se quedaron callados", contó.
"Su estrategia fue errada porque lo único que lograron fue que más gente fuera a las salas y eso también podría ocurrir en Estados Unidos", pronosticó.
Abundó que en México "la mayoría de su población es católica pero estos sectores no se han dado cuenta que una cosa es ser católico y otra que estos siempre van a seguir obedeciendo sin nunca reflexionar o analizar su realidad".
"Espero que la respuesta de los católicos en Estado Unidos sea más abierta que en México, para que el publico vaya a ver la película y se de cuenta que sólo es una historia contada para cine", enfatizó.
Añadió que "la historia se tiene que ver con ciertos aspectos de la realidad pero como una película nada más".
Carrera reconoció que hasta el momento esta es la mejor película de su carrera. "Pero es difícil decir cuál es la que más me gusta porque es como cuando te preguntan a quien quieres más a tu mamá o a tu papá".
El cineasta ha dirigido películas como La Mujer de Benjamín" (1990), que ganó premios en los festivales de cine de Amiens; La Habana, Cuba; Huelva y Valencia, España; Montreal, Canadá; y el Ariel en México.
Otras cintas han sido La Vida Conyugal (1992) que ganó el premio de mejor cinta en festival de Trieste, Italia; Sin Remitente que ganó el Globo de Oro a la mejor cinta y "Un Embrujo" (1998).
El director mexicano comentó que él sigue la ideología católica desde pequeño, porque se formó en escuelas donde se predica la religión, aunque reconoció que mantiene una cierta distancia con el catolicismo que se predica en las iglesias.
"Me separé del catolicismo en mi adolescencia, cuando te das cuenta de algunas cosas y de que piensas de que las iglesias podrían hacer mejores cosas si se ponen a funcionar de otra manera", anotó.
Agregó "la institución es compleja. En mi película vemos que el padre Benito es un pillo que lava dinero, pero que cree en lo que está haciendo y no se queda con el dinero sino que lo destina a obras sociales".
Pero en general, dijo, "cada personaje me fascinó por la forma como fue interpretado por el reparto que respondió de una manera extraordinaria y que se conjunto a pesar de provenir de distintos medios de la actuación".
"Gael (García Bernal) en la vida real es más como el personaje que interpreta en la cinta "Y Tu Mamá También"; pero en su papel de Amaro tuvo carácter y se mostró muy profesional y Ana Claudia Talancón me sorprendió bastante por su gran intuición", manifestó.
Cuestionado sobre el asunto de la capa de la virgen que ha causado tanta polémica, comentó "lo que pocos saben es que viene en la novela del siglo XIX y cuando se escribió no hubo tanto problema".
"En la película la escena la dejé porque me gustó y porque quería ver hasta donde podría llegar el padre Amaro porque es él mismo quien pone el manto y le hace el amor a la catequista", explicó.
Carrera tiene dos proyectos para filmar en México: De la Infancia, historia de un fantasma que regresa a su niñez y La Mujer Que Cayó del Cielo. Una tarahumara que por no hablar inglés es internada en un manicomio en Estados Unidos.
El director mexicano dijo que se iría a vivir a cualquier parte del mundo en las que se hiciera buen cine, pero que Hollywood está lejos de ser la primera opción por la que se inclinaría sólo para obtener prestigio en el ámbito cinematográfico.
"Quiero seguir viviendo en el Distrito Federal, soy chilango y no me cambio por nada, pero como director quiero seguir haciendo películas en donde haya buenas historias ya sea en México o en donde sea", concluyó.
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AFIRMA QUE IGLESIA PERDIO CONVOCATORIA CON "PADRE AMARO"
El éxito que obtuvo en México la cinta "El crimen del padre Amaro" demostró que la Iglesia católica perdió poder de convocatoria entre sus fieles, afirmó el director del filme Carlos Carrera en declaraciones a la prensa panameña.
"El público que sigue siendo católico, le demostró a la Iglesia que no le va a seguir las indicaciones al pie de la letra, esa fue una reacción muy saludable. Han perdido autoridad en este tipo de cosas", comentó Carrera al diario La Prensa.
El cineasta reiteró desde México, en charla telefónica con el rotativo, que la película "no ataca en nada a la religión católica, sino que expone casos de hombres de carne y hueso con conflictos, que no se comportan cristianamente algunos de ellos".
"Nunca se cuestiona ningún punto de la religión", afirmó el director de la cinta más taquillera en México y que fue cuestionada por su contenido por la jerarquía católica de aquel país.
La película se estrenó en este país canalero la semana pasada sin comentarios hasta ahora de la Iglesia católica local y con un bajo perfil en las secciones de espectáculos en los periódicos, que han evitado analizar el contenido.
Carrera, al referirse al triunfo del filme señaló que se debió además a que "ahora el público mexicano está queriéndose ver en pantalla y el público internacional encuentra universales los temas que estamos tocando".
En torno a sus proyectos destaca una película de fantasmas sobre la historia de un niño que vive en el seno de una familia violenta, y otra sobre una india tarahumara que se va a Kansas pero la tildan de loca y la recluyen 15 años en una hospital siquiátrico.