SALTILLO, Coah.-- El presidente del Congreso, Heriberto Ramos Salas, rechazó que se permita vender bebidas alcohólicas los domingos como lo planteó la iniciativa privada en Torreón. Por su parte, el diputado del PRD, Francisco Ibarra Ríos, dijo que antes de tomar una decisión al respecto, es necesario que se reúnan los alcaldes de los cinco municipios conurbanos de la Región Laguna de Coahuila y Durango, a fin de unificar criterios.
REPRESENTARIA UNA SERIO PELIGRO
Ramos Salas, recordó que cuando él fue alcalde se tomó el acuerdo de acabar con la venta de bebidas alcohólicas los domingos, y prohibir a los expendios que las vendieran después de las 21:00 horas.
Dijo que esta decisión fue bien acogida por la sociedad, y que como ha arrojado buenos resultados se mantiene desde hace 15 años.
“Volver a flexibilizar los horarios es muy delicado; sería dar marcha atrás y representaría un peligro para toda la sociedad. Yo me opongo a ello”, expresó.
Consideró que a pesar del clandestinaje y de que los domingos se venden bebidas alcohólicas en Gómez Palacio, la prohibición en Torreón logró detener la venta inmoderada de alcohol.
Aclaró que la decisión sobre permitir la venta los domingos, le corresponde directamente al ayuntamiento de Torreón; sobre todo ahora con las reformas al artículo 115 constitucional que fortalece la autonomía municipal.
DEBE HABER UN ACUERDO COMUN
Por su parte, el perredista Ibarra Ríos consideró que debe haber un acuerdo entre los municipios de la zona conurbana, a fin de que se tomen medidas en común para abatir por un lado el clandestinaje y la venta inmoderada, y por el otro, bajar el índice de accidentes y delitos que se cometen bajo el influjo de las bebidas alcohólicas.
Reconoció que los comerciantes de Torreón tienen razón al decir que les afecta que en Gómez Palacio no haya “ley seca dominical”, pero que por lo mismo que esto representa un peligro, es necesario que se promuevan acuerdos entre Coahuila y Durango.
Dijo que además, por otro lado en Torreón persiste el clandestinaje porque hay corrupción y complicidad entre la policía municipal y los inspectores, para permitir la venta ilegal e inmoderada de bebidas alcohólicas.
Agregó que pese a que desde hace cinco años se considera delito penal la venta clandestina de alcohol, no habrá más de diez personas detenidas por incurrir en esta conducta ilegal.