La Jornada
México, DF.- Para facilitar las operaciones de las empresas maquiladoras en México la Secretaría de Economía promoverá el decreto para el fomento de este sector, que incluye la eliminación de requisitos, así como un régimen fiscal que dé certidumbre a los inversionistas, el cual podría incluir mantener la exención del pago del IVA.
La dependencia detalló diez estrategias para conseguir que México se consolide como uno de los principales centros de manufactura y detalló que a excepción de los dos últimos años de crisis para la industria maquiladora, desde la entrada en vigor del TLCAN, las exportaciones en este sector se cuadruplicaron y el número de empleos se elevó al doble.
En su Programa de competitividad para la industria maquiladora de exportación, la Secretaría de Economía reconoció que durante los últimos dos años México ha perdido competitividad en el sector maquilador, por lo que durante el año 2001 cerraron empresas dedicadas al ramo textil y de la confección, calzado, químico, de autopartes, juguetes, alimentos bebidas, servicios y diversas manufacturas.
Este, señaló la dependencia fue el primer decrecimiento de la Industria maquiladora de exportación (IME) en casi 40 años, por lo que los niveles de exportación fueron negativos en 3.2 por ciento, los de producción fueron menores en tres por ciento, los niveles de empleo fueron negativos en 17.3 por ciento y el número de empresas instaladas fueron 6.8 por ciento menos a las esperadas.
Los factores a los que se atribuyó esta crisis fueron la desaceleración de la economía de Estados Unidos, la fortaleza del peso, la entrada en vigor del artículo 303 del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), la incertidumbre fiscal, ineficiencias en las operaciones de comercio exterior y en la infraestructura, pérdidas por contrabando e inseguridad, el bajo desarrollo de cadenas de proveeduría.
Ante este panorama y con la intención de convertir a México en uno de los principales centros de manufactura a nivel mundial, así como uno de los más importantes fabricantes e de partes, componentes y bienes de consumo de alta demanda, la Secretaría de Economía definió diez estrategias para conseguirlo.
Estas comprenden el diferimiento del régimen de establecimiento permanente, el cual está negociado con la intención de dar certidumbre a los inversionistas ya que de no contar con esta medida les implicaría cargas impositivas poco atractivas; formular una estructura arancelaria competitiva; avanzar en la desregulación administrativa, combatir el contrabando y diseñar una política fiscal competitiva.
Así como atacar la inseguridad y en el mediano plazo trabajar en el desarrollo de cadenas productivas, mejorar la logística aduanera y los procesos de comercio exterior, introducir infraestructura digital y de transporte competitiva, y lograr un marco operativo y regulatorio competitivo el cual incluya un análisis de los esquemas de servicios del sector público.
Como parte de estas medidas la Secretaría de Economía promoverá el nuevo decreto para el fomento de la industria maquiladora de exportación con el cual buscará eliminar requisitos para su instalación y operación, pero a la vez establecerá la certificación maquiladora y también dentro de las acciones para estructura un marco normativo y regulatorio convincente para los industriales del sector, buscará fórmulas para evitar la doble tributación.
En su Programa de competitividad Economía detalló que dentro de la estructura impositiva que requiere el sector, debe haber una política fiscal que genere certidumbre, pero que también incentive nuevas inversiones por lo que la Secretaría de Hacienda estudia esquemas competitivos, mientras que una de las demandas del sector es mantener la exención del pago del Impuesto al Valor Agregado (IVA).