Agencias
HOLLYWOOD, E.U.- Por segundo año consecutivo, el cantautor español Alejandro Sanz resultó el gran triunfador de la entrega del Grammy Latino, que se realizó anoche en el Teatro Kodak de esta ciudad, con un total de tres estatuillas.
Alejandro Sanz aceptó su gran victoria con la mayor humildad, señalando incluso que le da "un poco de vergüenza" recibir tal reconocimiento en esta tercera edición de los Grammy Latinos, celebrada en el teatro Kodak de Los Angeles.
"Me siento un poco avergonzado porque todos los que están ahí se lo merecen tanto o más que yo", afirmó Sanz con sus tres pequeños gramófonos dorados en la mano y una sonrisa humilde y satisfecha a la vez.
Luego de que en la pasada entrega -que se viera pospuesta por los trágicos acontecimientos del 11 de septiembre- Sanz se llevara a casa cuatro premios, este año volvió a hacer suya la noche al triunfar en las nominaciones de Álbum del Año, por MTV Unplugged, Grabación del Año y Canción del Año, ambas por Y Sólo se Me Ocurre Amarte.
Por su parte, el músico norteño mexicano Ramón Ayala se llevó dos Grammy Latinos en los apartados de Mejor Álbum Norteño y Canción Regional Mexicana, convirtiéndose en el segundo mayor ganador de la noche.
Otros ganadores que destacaron fueron la cubana Celia Cruz, quien triunfó como Mejor Álbum de Salsa; Juanes, por Mejor Canción de Rock; La Ley, como Álbum de Rock Vocal Grupo; Miguel Bosé, Álbum Vocal Pop Masculino y Shakira Mejor Video.
Conducido por Gloria Estefan y Jimmy Smiths, la tercera edición del Grammy Latino se tornó en toda una celebración, en la que además de la entrega de premios destacaron algunas presentaciones en vivo, ya fuera por su espectacularidad o por su gran calidad interpretativa.
La noche inició con la presentación del cantante de origen puertorriqueño Marc Anthony, pero sería hasta la aparición en el escenario de la mexicana Thalía, que el glamour y la espectacularidad se harían presentes. La esposa del empresario Tommy Mottola emergió en lo alto del escenario con un llamativo vestido iluminado, que medía aproximadamente tres metros de largo, del cuál se desprendería para interpretar el tema No Me Enseñaste.
Otras de las presentaciones que destacaron fueron los duetos de Juanes y la canadiense Nelly Furtado, el de Carlos Santana y los rockeros de P.O.D., así como las de Vicente y Alejandro Fernández.
Presencia mexicana
Las rivalidades entre padre e hijo desaparecieron en el caso de Vicente y Alejandro Fernández, cuando el primero recibió el premio Grammy Latino al mejor álbum de música ranchera.
"Yo quería que se lo ganara mi hijo (Alejandro) porque yo ya tenía el otro", bromeó Vicente Fernández, luciendo en su poder no sólo el premio al autor del año sino el de mejor álbum ranchero.
Los cantantes mexicanos interpretaron juntos el tema Acá Entre Nos y Tantita Pena, haciendo temblar el auditorio Kodak con sus voces y poniendo en pie a un público poco habituado a este sonido tan mexicano.
El cantante hizo referencia a las diferencias de opinión que se han dado entre el artista y la organización en cuanto a las diferentes categorías que existen en estos premios y que, en su opinión, no han reflejado con toda justicia lo que él entiende por música hispana.
Otros mexicanos que destacaron fueron Joan Sebastian Álbum Grupero y Alejandra Guzmán por Álbum de Rock por Solista Vocal.