Aunque la sentencia del litigio por la ex Hacienda de La Ferrería es a favor de la familia Mertins, no es necesario forzar una situación en la que el gobernador Ángel Sergio Guerrero Mier se vea obligado a no acatar la ejecutoria, dijo el representante legal de los herederos de los dueños originales de la mencionada finca, Jesús Edgardo Guillén Reyes.
Luego de concluido el plazo, en la que el Gobierno del Estado debió emitir la resolución para establecer el procedimiento de devolución de la mencionada casona y su mobiliario y otros objetos de valor cultural, Guillén Reyes señaló que todavía no se cierran las posibilidades de la negociación.
La resolución en plazos legales se emitió ayer, como consecuencia del recurso de reversión del decreto de expropiación de la ex Hacienda La Ferrería, localizada en el municipio de Durango, promovido por la representación legal.
En este sentido, destacó que la devolución del inmueble prácticamente es un hecho, y sólo es cuestión de acatar la resolución ejecutoria a favor de la familia Mertins.
Acotó que éstos son los términos legales, sin embargo, la familia que promovió el litigio tiene plena disposición para un arreglo favorable para ambas partes, el cual puede concretarse en medida que el gobernador Guerrero Mier lo disponga.
Dijo que las administraciones gubernamentales anteriores al gobernador actual nunca compensaron con el pago respectivo a los antiguos propietarios de la citada casona, por el concepto de la expropiación decretada en 1988.
Y de hecho, la ausencia del mencionado pago por la expropiación fue el motivo central para promover el recurso de reversión del decreto de expropiación, además que el inmueble no cumplió con la finalidad que habían señalado las autoridades estatales, asentó.
Por otra parte, manifestó que es falso que detrás de este litigio existe de por medio un interés crediticio por parte del Banco Nacional de México, dado que hay una figura fiduciaria y no una cuestión de embargo o deudas pendientes con dicha institución bancaria.