Sergio Alfaro cometió una falta grave y las consecuencias no se hicieron esperar, la Asociación Lagunera de Beisbol anunció de inmediato una sanción por tiempo indefinido. Por ahora sólo se habla del pelotero y habrá quien lo catalogue como el villano de la película, en una apreciación a todas luces injusta.
Alfaro se equivocó, eso es claro, sin embargo, su conducta fue una reacción que en cualquier ser humano se puede entender, quizá no justificar.
Cuando un pelotero está en el terreno de juego, la adrenalina alcanza niveles superiores a los normales y eso aunado al carácter de la persona, puede traer como respuesta, acciones involuntarias, las cuales, sin embargo, causan daño a terceros y a uno mismo.
En los escenarios pequeños como los de la Liga Mayor de Beisbol de La Laguna, el público está muy cerca del terreno de juego y en muchas ocasiones hemos visto cómo algún aficionado se mete fuerte con el pelotero, el cual reacciona con violencia, como consecuencia del momento.
Todo lo anterior viene como un llamado a los aficionados para que dentro y fuera de los parques de beisbol observen una conducta ejemplar, en base a la presencia de damas y niños en las tribunas, quienes acuden con el deseo de disfrutar un espectáculo familiar, como ha sido una tradición en La Laguna cuando se trata del Rey de los Deportes.
Es cierto, el aficionado paga un boleto en la taquilla para disfrutar el espectáculo, pero eso no le da derecho a insultar a pelotero alguno o bien, a meterse fuerte con el manager o incluso el ampayer, porque cuando se sobrepasan los límites, suelen aparecer situaciones lamentables, como la que ahora se comenta.
Sergio Alfaro tiene derecho a una segunda oportunidad y seguramente ésta llegará, pero es importante que los aficionados que asisten a los diferentes escenarios de la Liga Mayor de La Laguna, hagan conciencia de que el pelotero, antes que nada, es un ser humano que siente y reacciona de acuerdo a las circunstancias.
Se ha vivido una exitosa temporada en la Liga Mayor de La Laguna, las asistencias a los parques son excelentes y el espectáculo ha sido de calidad; ¿por qué entonces caer en situaciones que no afectan a un pelotero o equipo, sino a todo lo que es el beisbol?
En los últimos años se ha tenido un saldo blanco durante la temporada de este circuito invernal y el hecho más lamentable se dio en aquella serie final entre los Astros de San Pedro y Matamoros, cuando un sector del público fue protagonista de actos violentos. Ahora la temporada está en su etapa de mayores emociones, cuando los juegos representan mucho, porque los contendientes buscan llegar al título.
Disfrutar del Rey de los Deportes en un verdadero ambiente familiar, es una verdadera fiesta y eso se debe dar en las cuatro plazas que aún están dentro de la pelea, aunque para lograrlo se requiere la colaboración del pelotero, con gran respeto hacia la tribuna, en la que es necesario haya personas educadas, que pueden gritar, pero todo dentro de los límites de la decencia y sin caer en insultos o agresiones.
Por lo pronto, las dos series semifinales están empatadas y este fin de semana habrá grandes emociones; el viernes en la Sección 74, Mineros recibe a Francisco I. Madero, en el tercero de la serie y la visita se paga el domingo. Por otro lado, Matamoros será anfitrión de San Pedro, en el Parque de la Sección 35 y el cuarto de ese play off, el domingo en la Unidad Deportiva de San Pedro.