TORREÓN, COAH.- Dos estaciones de combustible fueron objeto de robo por parte de los amantes de lo ajeno, uno de los cuales fue cometido con lujo de violencia al emplear el asaltante un arma de fuego con la que amagó al encargado de la gasolinera.
El atraco se cometió alrededor de las 23:00 horas, en el negocio ubicado en bulevar Independencia No. 3875 oriente de la colonia El Fresno, donde se ubica la Estación de Servicio Galerías 6338, hasta donde arribó un sujeto que preguntó por el baño a Anabel Molina, responsable del establecimiento.
Tras indicarle donde se hallaba, la encargada se acercó a uno de los despachadores al que se le iba a entregar un ticket de compra, cuando salió el desconocido del sanitario y acudió hasta donde se hallaban, para amagarlos con un arma de fuego, al parecer tipo escuadra.
El empistolado les exigió el dinero de la venta de combustible, para acto seguido introducir a los dos empleados a las oficinas donde despojó del dinero que llevaba el despachador, aproximadamente mil pesos en efectivo.
Tras conseguir su objetivo, el atracador huyó con rumbo desconocido, siendo sus señas las siguientes: Tez blanca, corte de pelo a la Flet Tap (tipo militar), de entre 23 y 25 años de edad; vestía pantalón y camisa negros y una mochila del mismo color en la espalda.
El segundo de los robos se cometió a la gasolinera ubicada en el estacionamiento de Hipermart Oriente en donde se apoderaron de 15 botes de aceite automotriz, para lo cual los ladrones forzaron la cerradura de la vitrina donde se hallaban. El monto de lo robado asciende a 400 pesos.
Sustraen de negocio dos computadoras
Los amantes de lo ajeno no descansan y prueba de ello es el robo cometido a un negocio de reparación de computadoras, de donde se llevaron dos portátiles de las llamadas Lap Top, en horas de la madrugada.
El negocio se ubica en privada Guillermo Prieto No. 22 de la colonia Centro, que se quedó solo cuando los empleados salieron a comer de las 14:30 a las 16:17 horas del lunes pasado y al regresar se dieron cuenta que faltaban dos computadoras portátiles que tenían para su reparación.
Los cacos se introdujeron por una de las puertas del local, para lo cual forzaron la cerradura.