Personajes de 18 países apoyan la causa zapatista. Las alianzas internacionales establecidas por Marcos antes de que Fox arreglara en quince minutos el caso Chiapas, se mantienen. La vigilancia in situ de observadores nacionales y extranjeros no se detiene y menos ahora que el Poder Ejecutivo, el Poder Judicial y el Legislativo se han unido vergonzosamente para que los indígenas se queden en donde han estado durante 500 años, organismos como la Comisión Civil de Observación por los Derechos Humanos, CCIODH, están constantemente actualizados sobre lo que pasa en Chiapas
Las conclusiones y recomendaciones de la Comisión Civil Internacional de Observación por los Derechos Humanos (CCIODH) en Chiapas recibieron el apoyo de cientos de personalidades, parlamentarios, dirigentes políticos, académicos, sindicatos, organismos sociales y ciudadanos de 18 países de Europa, América Latina y África. Entre los firmantes destacan escritores como José Saramago y Manuel Vázquez Montalbán, el cantante Manú Chao, el teólogo italiano Giulio Girardi y el suizo Jean Ziegler, relator especial de la ONU sobre Derecho a la Alimentación; así como 14 diputados del Parlamento Europeo, entre ellos Alain Krivine y Lucio Manisco. Hubo también en la lista diputados y alcaldes suizos, italianos y brasileños”, He aquí parte del informe:
“Los sobrevuelos de aeronaves militares federales siguen sembrando zozobra en las comunidades, los patrullajes y retenes del Ejército mexicano han ido aumentando paulatinamente y ya se ha hecho costumbre que los soldados improvisen sus puestos de control en los alrededores de las poblaciones para acosar e intimidar a los indígenas.
Los grupos paramilitares que están dentro de un esquema de contrainsurgencia que se enmascara de agresiones por problemas de tierras, confrontaciones partidarias, conflictos religiosos, enemistades personales, venganzas familiares o simplemente accidentales, ocultando de este modo la estrategia paramilitar de control, desestabilización y represión selectiva como parte de una guerra sucia, diseñada y dirigida desde las más altas estructuras del poder.
Lejos de contener a los grupos paramilitares, éstos siguen generando múltiples conflictos, cerrando caminos, aplicando una política de terror, asesinatos y de agresiones constantes contra las comunidades zapatistas, apoyados, como siempre, por las viejas estructuras municipal y comunal priístas, y gozando de la complicidad por omisión y comisión del Ejército y los cuerpos de seguridad de diversas dependencias gubernamentales”.
Miles de indígenas “desplazados por la guerra y la contrainsurgencia que sigue sin resolverse”. Y cuestiona el uso de los programas de desarrollo para romper la resistencia y dividir a las comunidades indígenas. Las reformas constitucionales en materia indígena no han dado satisfacción a las pueblos indios que no ven reflejados en ellos la esencia de los acuerdos de San Andrés”. La iniciativa de reforma de la Cocopa es la única que puede restablecer las condiciones mínimas del diálogo de paz”.’
LA SUPREMA CORTE que dio uno que otro campanazo, cancelando planes entreguistas de Fox, en materia indígena se comporta como la Suprema Corte de USA de la que aquí se consignan de vez en cuando aberrantes decisiones, como la de no reconocer, derecho laboral alguno a nuestros indocumentados, que emplean amplia y abiertamente empresas y particulares gringos, lo que permite a los malos patrones hasta olvidarse de pagarles, ejerciendo con ellos la misma conducta que con los negros antes de que Lincoln aboliera la esclavitud. La Corte hubiera podido cubrirse de gloria de haber querido hacer real justicia, sin enredos retóricos en materia indígena. Pero como Pilatos, se lavó las manos, pretendiendo no tener posibilidad jurídica de estudiar las más de 300 controversias presentadas, fácil, rápido y del agrado del gobierno. En mi opinión, es bastante evidente la Suprema Consigna y la Suprema Irresponsabilidad de los sacrosantos ministros de la Suprema Corte.
Como representante del Poder Judicial, demostró que no hay tal división de Poderes en México,
EN CUANTO AL CONGRESO, el Poder Legislativo, que también en algunas ocasiones se comportó como un verdadero congreso frente a Fox, en materia indígena igual demostró su sometimiento a una atroz consigna contra toda ley que pueda realmente reconocer que los indígenas son dueños de su destino y -esto es el problema- de su suelo y subsuelo. Para evitarlo se unieron en el Senado los viejos enemigos Bartlett y Fernández de Cevallos y sus respectivos grises correligionarios. No surgieron figuras defensoras de los indígenas contra este par de racistas.
¿Y los diputados perredistas también fueron cooptados? Ni Jesús Ortega ni Sodi tienen ya credibilidad. De no lograr a la brevedad posible la reforma de la reforma, obteniendo que pase por fin y sin más historias la original Ley de la Cocopa, basada en los Acuerdos de San Andrés Larráinzar, y aceptada y después rechazada con un descaro infinito, la actual Legislatura pasará a la historia como amanuense del presidente, amanuense de los gringos. Demostrará que el Poder Legislativo no es independiente.
FOX Y EL “PUEBLA - PANAMA”, (en manos de Castañeda), son la respuesta a las preguntas sobre la terca detención de una buena y definitiva Ley para los indígenas. El mismo nombre transnacional del plan revela su origen. A un presidente mexicano no se le ocurre engullirse toda Centroamérica sin pestañear. Pero a la maldita globalización, sí. Los bancos y las compañías quieren las riquezas de esas tierras desde el petróleo hasta el uranio, pasando por todo lo demás. ¿De quiénes son? Básicamente de los indígenas, Serían un obstáculo si fueran verdaderos ciudadanos.
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