La Jornada
México, DF., La alerta sanitaria se mantendrá al menos durante los próximos dos meses en las zonas afectadas por el huracán Isidore, informó Julio Frenk Mora, secretario de Salud. Admitió que aun cuando la situación está bajo control, existe un alto riesgo de enfermedades.
Dijo que ya empezaron las tareas de fumigación para evitar brotes infecciosos de dengue, principalmente. Recordó que esta actividad de limpieza se realizó antes de la llegada del meteoro, por lo que se logró la eliminación de muchos de los criaderos de larvas y por eso no ha habido una alta incidencia del mal. Sin embargo, ahora se tiene que empezar desde cero. En tanto, el secretario de Gestión Social del CEN del PRI, Omar Bazán, informó que ese partido reunió alrededor de 60 toneladas de víveres que se destinarán a los damnificados de Yucatán y Campeche. Sostuvo que será a través de los comités municipales y estatales como se va a distribuir la ayuda, aunque negó que no se utilizará esta acción con fines ni partidistas ni electorales. Bazán, quien a última hora ofreció la conferencia que inicialmente daría la esposa de Roberto Madrazo para dar a conocer el apoyo que el PRI daría a los damnificados, dijo que fueron los priístas de esas entidades los que pidieron este apoyo. Sin embargo, aseguró que no se va a entregar sólo a los militantes de su partido, sino a todos los ciudadanos, ya que “debemos dejar a un lado el sentido político” y darle un sentido social.
No se va a condicionar a ninguna situación de militancia, tampoco se comprometerá a quienes reciban los apoyos ni se distinguirá entre simpatizantes del partido. Los víveres y todo lo que se ha logrado reunir se dará en forma equitativa a todo aquel que lo solicite hasta donde alcance y se espera recaudar más para continuar con este apoyo, aseguró este secretario. La Alianza Mexicana de Organizaciones Productivas, Sociales y de Servicios integrada por diferentes delegaciones del PRI en el Distrito Federal, aportaron 60 toneladas de artículos no perecederos que fueron transportados hasta las instalaciones del CEN del PRI. Se prevé que hoy mismo se hará llegar esta ayuda a las familias necesitadas, la cual consiste en agua embotellada, aceite, arroz, frijol, papel higiénico, jabón, sopas, latas y pañales.
Por otra parte, en entrevista al término de la ceremonia inaugural de la Reunión Anual de la Conferencia Interamericana de Seguridad Social (CISS), Frenk Mora detalló que por las inundaciones todavía existentes en las zonas afectadas el riesgo de que surjan enfermedades es muy alto.
El objetivo de mantener la alerta sanitaria, explicó, es preservar la salud de la población, y continuar la labor iniciada desde un día antes de la llegada del huracán. Mencionó que otro de los factores de riesgo son los animales muertos, los cuales ya se empezaron a enterrar. A todos los cadáveres se les está echando cal. Además, está latente la aparición de enfermedades diarreicas, pues aunque hasta ahora no se ha registrado ningún brote la falta de agua potable es preocupante, apuntó.
Por eso, el restablecimiento del servicio de agua potable está en la máxima prioridad de la Comisión Nacional del Agua. Mientras tanto, las brigadas médicas se han dado a la tarea de repartir solución de plata coloidal y pastillas para desinfectar el líquido disponible. El funcionario recordó que dos días después de la emergencia, las entidades afectadas recibieron 18 millones de pesos provenientes del Fondo Nacional de Desastres, con los cuales se cubrieron las necesidades de medicamentos, principalmente para reemplazar los fármacos que se echaron a perder con las inundaciones.