México, D.F.- En menos de un mes el Senado de la República tendrá listo el dictamen final sobre la reforma eléctrica, impulsada por el gobierno federal, ante la cual “existe consenso partidista” para que este sector se abra a particulares, “para compensar las necesidades de los grandes consumidores”.
Así lo informó el legislador panista Fauzi Handam, quien reiteró que la iniciativa del Ejecutivo “no es intocable”, por lo que sufrirá modificaciones para que con la participación privada se genere y distribuya electricidad a 520 “grandes compañías usuarias”, y la CFE abastezca a los “pequeños usuarios”.
A su vez, el subsecretario de electricidad de la Secretaría de Energía, Nicéforo Guerrero Reynoso, estableció que la iniciativa propuesta por el presidente Vicente Fox Quesada parte de la necesidad de “hacer constitucional lo que se creó de manera inconstitucional en 1992”.
En el marco del Seminario “La Reforma Eléctrica: Retos y Perspectivas”, organizado por el departamento de economía de la Universidad Iberoamericana, el funcionario consideró indispensable la creación de una ley orgánica para la Comisión Federal de Electricidad, ante la inminente competencia con empresas privadas.
Al respecto, el presidente de la Asociación Mexicana de Energía Eléctrica, Eduardo Andrade Iturribarria, dijo que de liberarse un monto de generación por 5 mil millones de pesos anuales, el mercado para las empresas privadas en cuanto a ventas sería del orden de los 110 mil millones de pesos cada año.
El subsecretario recordó que a partir de la ley emitida durante el gobierno salinista, al menos un 20 por ciento de la generación eléctrica está en manos de particulares; 16 por ciento se maneja de manera independiente y el cuatro restante es para autoconsumo.
El investigador del Colegio de México, Alejandro Castañeda Sabido, hizo una breve comparación entre las propuestas de reforma a dicho sector durante el anterior sexenio, la iniciativa de los senadores del PRI en la actual legislatura y la del presidente Fox Quesada.
Se comentó también que el consumo per cápita en México es de seis mil kilowatts al año, con una producción de 52 mil megawatts. No obstante, para estar al nivel de España se requiere incrementar la producción a 92 mil megawatts; al de Corea a 110 mil y al de Estados Unidos a 270 mil.
En el seminario se cuestionó también la eventual continuidad del “monopolio” eléctrico, además de que los subsidios a la población aún son del orden del 75 por ciento, “y sin embargo los consumos de estos sectores en nuestro país son comparables a los de naciones africanas como Gabón o Zimbabwe”.
En contradicción con la postura del subsecretario Nicefóro Guerrero y del investigador Alejandro Castañeda, Fauzi Handam sostuvo que a un mes de dar a conocer el dictamen, el punto fundamental es la viabilidad técnica de electrificación del país, y dejar de lado los matices respecto a la “economía liberal que en este contexto son minucias intrascendentes”.
Para el subsecretario de energía, el incremento a las tarifas eléctricas no deben ser una medida recaudatoria, como sucedió el año pasado, ni tampoco ser definidas con base a índices inflacionarios, sino determinadas a través de la Comisión Reguladora de Energía (CRE).
Anotó por último que el suministro eléctrico para el sector agropecuario ha sido una prioridad para el actual gobierno, ya que por cada peso, el Estado pone 70 centavos y sólo 30 centavos el productor, si bien se estudia una tarifa fija de entre 30 y 32 centavos, sin que intervengan los fenómenos inflacionarios.