Berna, Suiza.-Dos semanas después de su ingreso oficial al seno de las Naciones Unidas, Suiza dijo que utilizará su histórico estatus de país neutral para luchar en favor de la paz y los derechos humanos en el mundo.
Suiza, sede del Comité Internacional de la Cruz Roja puede, gracias a su historia de neutralidad, jugar un papel en favor de la paz que está cerrado a otros países, dijo en una entrevista el ministro de Relaciones Exteriores, Joseph Deiss.
“Como país neutral podremos, de tiempo en tiempo, jugar un papel que está cerrado a otros miembros de la ONU”, dijo Deiss.
Suiza, que quiere evitar la guerra en Iraq, piensa enviar a sus propios expertos en el grupo de inspectores de armas de la ONU que regresará a Bagdad a continuar su trabajo, interrumpido en diciembre de 1988, dijo.
“Queremos ser dentro de la ONU un país que aporte propuestas fuertes en favor de los derechos humanos, de la democracia y del respeto irrestricto a la ley”, dijo.
Reiteró que Suiza incrementará, en el marco de la ONU, sus esfuerzos internacionales en favor de la paz.
La nación alpina ha representado los intereses de Estados Unidos ante Irán y en enero auspició conversaciones entre el gobierno de Sudán y los representantes del Movimiento para la Liberación de Sudán.
“Suiza tiene una antigua e importante tradición de buenos oficios”, dijo Deiss. “Pero debemos admitir que en esta época es muy difícil lograrlo en forma aislada”.
La flamante membresía de Suiza en la ONU no cambió en nada la política de Relaciones Exteriores del país, pero le dio una gran oportunidad para ampliar sus esfuerzos internacionales en favor de la paz.
“Es un error propagar la idea de que vamos a abandonar nuestra posición de neutralidad por haber ingresado a la ONU”, dijo Deiss. “También es un error asumir que debido a nuestra neutralidad vamos a ser un país de segunda dentro de la ONU, o un caso especial”.
El histórico ingreso de Suiza a la ONU a principios de mes marcó un paso importante de este país, que se alejó así de su tradicional aislacionismo, lo que levantó especulaciones de que quizás la oposición a convertirse en miembro de la Unión Europea pudiera relajarse también.
“En relación a un posible ingreso a la UE, me parece obvio que en este momento ese plan no tiene ninguna oportunidad”, dijo Deiss.
Sin embargo, admitió que hay un plan a mediano plazo para realizar un referendo sobre el posible ingreso a la UE.
Suiza está negociando varios acuerdos bilaterales con la UE, cuyos países miembros han estado insistiendo para que haga más flexibles sus leyes sobre el secreto bancario, con el objetivo de evitar evasiones fiscales.
“No piense que hemos contestado que no a esas demandas”, dijo Deiss. “Hemos demostrado que estamos preparados para encontrar soluciones en las que se tomen en cuenta las demandas de la UE”.
Deiss negó que se hayan enfriado las relaciones con otros países luego que el fin de semana los suizos votaron contra una propuesta para donar ingresos de la venta de oro a un fondo de solidaridad, actitud que muchos vieron como respuesta a las críticas por el papel que jugó el país en la Segunda Guerra Mundial.
“Lamento mucho esta decisión, que nos impide llevar a cabo un acto de solidaridad”, dijo.
“Aunque yo no le daría mucha importancia a las consecuencias en el exterior”.