CARACAS (AP).- El Tribunal Supremo de Justicia suspendió este miércoles la intervención militar de la policía metropolitana, que ordenó el gobierno hace un mes para enfrentar un conflicto laboral en ese cuerpo.
La decisión del máximo tribunal es considerada como un triunfo para la oposición debido a que anuló la medida que tomó el presidente Hugo Chávez que le quitó el control de la policía al alcalde metropolitano, Alfredo Peña, un férreo opositor del gobierno.
La intervención de la policía, ocurrida el 16 de noviembre, fue el catalizador que precipitó las acciones de protesta de la oposición y llevó al paro nacional que cumplió este miércoles diecisiete días.
Los magistrados de la Sala Constitucional dejaron sin efecto a partir de este miércoles la medida de intervención y el nombramiento del comisario Gonzalo Sánchez como nuevo jefe de la policía metropolitana, quien había sustituido al comisario Henry Vivas.
El Tribunal Supremo de Justicia dio un plazo de dos semanas para que cese la intervención y el alcalde Peña retome el control de ese cuerpo.
Peña calificó la sentencia como "muy positiva", y agregó que gracias a esa decisión se "restablece la normalidad" debido a que se regresa el control del cuerpo a su autoridad natural que es la Alcaldía Metropolitana.
El ratificado jefe de la policía Henry Vivas se mostró confiado que el presidente Chávez y los policías oficialistas acatarán la decisión.
"Hay una decisión de un tribunal y hay que acatarla, más si es el del más alto tribunal", indicó Vivas.
"Estoy seguro que nadie intentará ir contra un dictamen del máximo tribunal del país", afirmó el jefe policial en alusión a las declaración que emitió el presidente Chávez en la que instó a la fuerza armada a desconocer las decisiones de los tribunales si van en contra de las acciones del gobierno.
"No podemos permitir que un juez...impida la aplicación de un decreto presidencial", dijo Chávez durante su programa dominical radiotelevisado "Aló Presidente" al cuestionar las decisiones de jueces regionales sobre algunos actos del gobierno federal.
Descartó también se desate en "una cacería de brujas" en contra de un pequeño grupo de policías que desconoció la autoridad de Peña y apoyo la intervención federal de ese cuerpo de seguridad.
"Pueden estar seguros que nunca jamás permitiré que se desate una cacería de brujas. Siempre la ponderación ha guiado mi labor como policía y en esta ocasión pueden tener la seguridad que no será diferente", agregó.
Cuando el presidente Chávez envió el 16 de noviembre a centenares de militares y tanquetas a tomar el control de las comisarías de policía de Caracas, Vivas ordenó a la mayoría de sus 9.000 oficiales permanecer en sus cuarteles para evitar enfrentamientos con el ejército.
Alcidés Rondón, viceministro de Seguridad Ciudadana del Ministerio de Interior y Justicia, aseguró que el gobierno "saluda con alegría la decisión del Tribunal Supremo de Justicia, donde quedó muy claro que la actuación" de ese despacho "estuvo sujeta a derecho" en oposición a la demanda del alcalde metropolitana que califico la acción del gobierno federal como inconstitucional.
La sentencia estableció que "la calificación de inconstitucionalidad no tenía ningún fundamento legal, era solamente una bandera política", indicó.
El dictamen, según Rondón, dejó "claramente establecido que lo único que nos ha motivado ha sido resolver los problemas internos de ese cuerpo, buscar ser mediador en un principio".
"Quedó demostrado que en ningún caso el gobierno ha tenido intención de apoderarse de la Policía Metropolitana por tiempo indefinido porque le habíamos puesto termino en el papel" a la intervención.
El ministro del Interior, teniente retirado Diosdado Cabello, horas antes defendió la intervención del cuerpo policial señalando que la medida está ajustada a derecho.
Cabello declaró, antes de conocer la sentencia, que "si cualquier otra policía local o regional se considera que hay razones para someterla a una intervención, con toda seguridad lo vamos a hacer".
El presidente Chávez justificó la intervención de la policía metropolitana señalando que su gobierno no permitiría "un cuerpo de ese tipo anarquizado".
La intervención agudizó las divisiones entre agentes contrarios y partidarios del gobierno. Por más de 33 días, la policía ha contado con dos directores, Sánchez, quien sigue instrucciones directas de Cabello, y Vivas, quien rinde cuentas a Peña y mantuvo el apoyo de casi todos sus subalternos.
La crisis en la policía capitalina, integrada por 9.000 personas, ha provocado una disminución en los patrullajes y un aumento de la delincuencia, según denuncian los propios habitantes de esta capital.
Esta es la quinta vez en menos de cinco meses que el Tribunal Supremo emite una sentencia que contraria una decisión gubernamental y sus aliados políticos.
La sentencia absolutoria de cuatro altos oficiales rebeldes, que emitió el máximo tribunal el 14 de agosto, generó entonces violentas protestas callejeras en Caracas y fuertes críticas de parte de Chávez, quien calificó la medida absolutoria como una "plasta (excremento)" jurídica.
Los 20 magistrados del máximo tribunal fueron nombrados en el año 2000 con el apoyo de la bancada oficialista.