Torreón, Coah.- Niños llorando, empresarios que no dieron la cara y padres de familia enfurecidos, fue el resultado del concierto de Tatiana, el cual estaba programado realizarse la tarde de ayer en el Auditorio Municipal.
Hace 34 días los seguidores de La Ley se llevaron una gran sorpresa: el concierto del grupo no fue realizado y el dinero de los boletos no les fue devuelto; este sábado la historia fue parecida, la gran diferencia fue que en esta ocasión la gente sí recibió el importe de las entradas.
Desde hace algunos días, una estación de radio anunció que Tatiana ofrecería un concierto el sábado 30 de noviembre en punto de las 4 de la tarde en el Auditorio Municipal. Por más de una hora, alrededor de 70 personas estuvieron esperando afuera del recinto deportivo, mientras tanto y sin que nadie diera explicaciones, dentro del Auditorio un grupo de individuos empezó a desmontar el escenario y las sillas que habían sido instaladas para ser ocupadas por el público.
Ismael Martínez, administrador del Auditorio Municipal, aseguró que nadie se le acercó para notificarle la cancelación del evento, él se percató porque vio a unas personas quitando las bocinas.
“Nada más vi que empezaron a quitar las bocinas y fue cuando supuse que se había suspendido. Minutos antes dejé entrar a la gente por que se estaban muriendo de frío, también para que se dieran cuenta cómo estaba la situación”, declaró.
Según Ismael Martínez, el mismo sábado pero a las 10 de la mañana, un equipo de gente instaló el foro, y un mes atrás un hombre llamado Eusebio Rodríguez separó el inmueble para dicho espectáculo.
Estaba programado que sería Vita Uva quien abriría el concierto, él llegó al Auditorio puntualmente acompañado por dos payasos más, pero al ver que no se realizaría nada optó por retirarse.
Mientras tanto, por la parte trasera del Auditorio Municipal, cuatro hombres que estaban cargando el equipo que utilizaría Tatiana, y quienes pidieron mantenerse en el anonimato, dijeron que la camioneta donde estaba ella sí llegó al sitio, también los bailarines.
“Lo que nosotros escuchamos fue que se suspendió el concierto debido a la poca gente que asistió, pues casi no hubo publicidad”.
Es el segundo concierto que se suspende en menos de dos meses en La Laguna, situación que aumentó la desconfianza que existe de la sociedad para asistir a otros eventos.
A recuperar el dinero
Inmediatamente después que la gente se percató de la cancelación del espectáculo, se abalanzó a las taquillas del Auditorio, y aunque las encargadas se rehusaban al principio a devolver el dinero, no tuvieron más opción que regresarlo.
-¿Quién les dio la orden de entregar el dinero? “No se nos dijo nada, los empresarios se retiraron, la gente fue la que empezó a pedir el dinero, por eso lo regresamos”, mencionaron dos de las taquilleras.
Al cuestionarles la causa de la suspensión del evento, enviaron a los reporteros de El Siglo con un joven vestido de gris y que no cesaba de hablar por teléfono, mismo que al ser interrogado, respondió llamarse Rodrigo y aseguró que no tenía nada que ver con el espectáculo.
-Entonces, ¿por qué nos mandó la gente de taquilla contigo? “No sé, yo vine a ver a Tatiana”.
-¿Sin niños? “¿Qué tiene? A mí me gusta”.
Minutos más tarde, otro hombre se acercó a entregar dinero a la taquilla, mismo que sería utilizado para regresarlo a la gente.
-¿Cuál es su nombre señor? (Con paso presuroso y sin voltear contesta) Arturo.
-¿Por qué no se realizó el concierto de Tatiana? “No llegó, no salió del aeropuerto de México”.
Gran molestia entre
el público
Concepción Muñoz y César Tavares, acompañado por otro adultos y dos pequeñas, pagaron 180 pesos por cada boleto, sus lugares se ubicaban en las primeras filas.
“Ya nos regresaron el dinero, pero al principio no nos lo querían dar, argumentaban que no tenían órdenes y que tampoco les habían avisado que se iba a suspender el concierto; nos estaban diciendo eso cuando ya habían desmontado el escenario”.
Estos padres de familia contaron que no hubo persona alguna que se acercara a la gente para informarles la suspensión del evento, ellos lo constataron al ver que estaban retirando el sonido.
Entre los afectados se encontraban personas de la ciudad de Durango, quienes viajaron desde aquella entidad únicamente para ver a la devaluada “Reina de los Niños”.