MÉXICO, D.F.- En duelo de "cañonazos" y cambios de ritmo constantes, el alemán Jerome Becker impuso su mejor técnica y se proclamó campeón de la 25 Copa Internacional Casablanca de tenis juvenil, que significó su primer título de la ITF.
El décimo cabeza de serie, de 17 años de edad, venció ayer, en el cierre de la competencia, por 7-5 y 6-2 a su compatriota Sebastian Rieschick en una hora y 10 minutos, es decir, la Copa Casablanca ya tenía asegurado al tercer monarca alemán de su historia.
Jerome Becker, quien lleva un apellido de peso en el ámbito del tenis mundial, obtuvo 150 puntos para la clasificación mundial de la Federación Internacional de Tenis (ITF), que lo ayudarán a meterse entre los 100 primeros, ya que actualmente ocupa la posición 102.
La primera manga, como lo indicó el marcador, resultó cerrada y de volteretas, ya que Becker tomó ventaja de 4-3, luego se puso abajo 4-5 y finalmente ganó los siguientes tres juegos en fila, incluido el decimoprimero con rompimiento de servicio, para acreditársela.
Pese a que pisó la cancha central del Club Casablanca sin ser cabeza de serie y en el sitio 226 del ranking mundial, por su 1.88 metros de estatura y corpulencia, Rieschick dio la apariencia de tener las condiciones necesarias a fin de alzarse con la corona.
Así lo demostró con potentes saques y devoluciones, además de repetidas "dejaditas" que pusieron en aprietos a su oponente (1.80m), que, sin embargo, respondió igual, pero con el argumento extra de una volea y un revés a dos manos mejor ejecutados y precisos.
De un momento a otro pasaban del "bombardeo" a las "dejaditas", para enfrascarse luego en una batalla desde el fondo de la cancha en la que ambos le pegaban con rencor a la pelota, lo que generó un partido variado que dejó grato sabor de boca.
Sin embargo, la segunda manga fue dominada ampliamente por Becker y por su técnica superior, pues su connacional, de 16 años de edad y quien es mejor doblista (72 del mundo), comenzó a dejar en la red innumerable cantidad de devoluciones, unas veces por precipitarse y otras por querer resolver el juego basado solamente en la potencia.
Así el nativo de Berlín debió conformarse con 100 unidades para las listas de la ITF y el trofeo de subcampeón, pues en realidad no mereció más por la actitud con la que asumió el segundo set, en el que unió a su desgarbada figura cierta displicencia.
Tal vez por sentirse derrotado desde que se fue abajo 4-2, Rieschick decidió entregar el juego sin ofrecer más, ya que además ambos tenían prisa, y es que tras el partido y la ceremonia de premiación les quedaba menos de hora y media para abordar el avión con destino a Mérida, sede a partir de hoy de la Copa Yucatán.
La víspera, la holandesa Michaela Krajicek ganó a sus 13 años el título de sencillos; el de dobles fue para la eslovena Andreja Klepac y la lituana Aurelija Miseviciute. En dobles masculino ganaron los holandeses Romano Tatuey y Bram Ten Bo de 7-6 (7/4) y 6-3 ante sus compatriotas Jesse Huta Galung y Coen Van Keulen.
De esta manera libró la Copa Casablanca, que esta vez tuvo el Grado Uno de la ITF, la primera batalla por el Grado A, que también quieren la Copa Yucatán y la Copa del Café (Costa Rica). La designación definitiva se realizará en 2005.