La Haya (Holanda), 14 nov (EFE).- Un jugador del Wilhelminaschool, equipo aficionado de Eschende (Holanda), fue hoy sancionado con ocho semanas de suspensión después de abrazar al árbitro en el transcurso de un partidos.
El futbolista sancionado, Martin Bennink, abrazó la cabeza del colegiado cuando éste le mostró la cartulina roja por cometer una dura entrada sobre un rival.
Bennink ha sido suspendido por "violencia psíquica y atentar contra el pudor", según refleja la sanción ante la que el futbolista ha alegado que "sólo abrazó al colegiado cuando su primer impulso era besarle". EFE