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CARACAS, VENEZUELA.- A 24 horas de que la oposición venezolana entregue a las autoridades electorales más de un millón de firmas pidiendo un referéndum, el presidente Hugo Chávez reiteró ayer su rechazo a una solución a la crisis que sea inconstitucional.
En su habitual programa dominical de radio y televisión "Aló, presidente", Chávez dijo que los acuerdos que se adopten en una mesa de diálogo que pretende instalar esta semana la Organización de Estados Americanos (OEA) deben estar enmarcados en la Constitución.
"Cualquier acuerdo debe estar en el marco de la Constitución.
Fuera de ella... nada, prohibido, todo debe estar en ese espíritu", enfatizó el mandatario, quien añadió que algunos sectores opositores ya asumieron que la salida a la crisis está en la vía electoral.
La opositora Coordinadora Democrática -que agrupa a 12 partidos políticos y 13 organizaciones civiles- mantiene a firme su posición de que se realice un referéndum consultivo este año para decidir si Chávez debe abandonar la presidencia de Venezuela.
La Constitución establece la posibilidad de realizar un referendo consultivo, donde se puede revocar el mandato presidencial, transcurrida la mitad del período, que Chávez cumple en agosto de 2003, pero la oposición desea adelantar esa posibilidad a este año.
En cuanto a la cuarta visita de este año a Caracas que iniciará el próximo lunes el secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), César Gaviria, para tratar de facilitar un diálogo, Chávez acotó que los problemas los solucionan los venezolanos.
"Aquí la principal ayuda es la nuestra. Los problemas de Venezuela los solucionamos los venezolanos", puntualizó Chávez, tras lo cual acotó que "Gaviria, cada vez que viene y entra en contacto para el diálogo, se da cuenta de la realidad".
Por este motivo, precisó que "ya no le van a echar cuento en Washington y siente los efectos de sectores enceguecidos" de la oposición venezolana que sólo desean que el ex militar deje el poder del país a la brevedad.
Reiteró que su gobierno apoya las gestiones que el ex mandatario colombiano reanudará hoy en Caracas para facilitar un diálogo con la oposición y externó que el regreso de Gaviria se produjo "a pedido nuestro".
El mandatario reconoció que hay algunos sectores de la oposición venezolana que están "recuperando la racionalidad democrática" y sometiéndose a la Constitución.
La alianza opositora y otros grupos anunciaron que el próximo lunes una multitudinaria marcha recorrerá varias de las principales calles de Caracas para entregar al Consejo Nacional Electoral (CNE) al menos un millón de firmas que apoyan la consulta popular.
Chávez enfrenta una cada vez mayor oposición de la sociedad civil, la cual ve la salida del mandatario como única solución a la profunda crisis económica y social que desde hace tres años vive la cuarta nación productora mundial de petróleo.
La víspera, el vicepresidente José Vicente Rangel rechazó que las firmas obliguen a Chávez a convocar a elecciones anticipadas o a renunciar, como desean sus opositores, quienes amenazan con realizar un paro nacional si no opta por una de estas opciones.
Chávez retó la semana pasada a la oposición a promover una reforma constitucional en el Congreso para adelantar el referéndum revocatorio y afirmó a corresponsales extranjeros que no teme llamar a una consulta popular que esté dentro de la Constitución.