GÓMEZ PALACIO, DGO.- Una solución inmediata a la invasión del bordo de protección del río Nazas demandó el presidente de la Delegación Laguna de la Cámara Nacional de la Industria del Vestido, Antonio Juan Marcos Villarreal a las autoridades municipales y federales, al considerar imposible que intereses políticos o de partido estén perjudicando la imagen de empresarios ante empresas extranjeras.
Aunque el organismo empresarial no ha recibido la solicitud de intervención del dueño de ?Indus-trias Apparel? como integrante del mismo, Juan Marcos Villarreal manifestó que estaba enterado de la pérdida de contratos y cancelación de un proyecto de ampliación por parte de los asociados norteamericanos de la empresa maquiladora, quienes mostraron preocupación por la invasión de terrenos a tan sólo unos metros de la factoría.
El presidente de Canaive dijo que ya en otra ocasión hubo un problema similar en perjuicio de una empresa textil, las que no son las únicas afectadas sino toda la imagen de la industria en general, que tantos esfuerzos hace para sostenerse en épocas difíciles.
Es imposible, refirió, que intereses políticos o de partidos dañen la imagen de los gobiernos y empresarios ante inversionistas extranjeros como en el caso de ?Industrias Apparel?, pues existe un marco de legalidad y derecho que debe hacerse valer.
Mucho menos es válido que las autoridades eludan su responsabilidad; en todo caso, debe buscarse una solución en conjunto específicamente en la invasión del bordo de protección del río Nazas, pues se trata de una franja de terreno federal que no deja de pertenecer al municipio de Gómez Palacio.
A ese respecto, el presidente de Canaive mencionó que el gobierno municipal ha fungido como un buen promotor de la industria en la región y ha demostrado actuar hasta donde la Ley se lo permite; se requiere por tanto una respuesta inmediata de la Comisión Nacional del Agua para lograr que las más de 100 familias que invaden el terreno se reubiquen a otro punto de la ciudad.
Consideró que el conflicto va más allá de la simple necesidad de espacios para viviendas y que lo anteceden intereses de carácter político, toda vez que las familias precaristas no han accedido a las propuestas de ser reubicadas a las reservas territoriales del ex ejido Filadelfia, al norte de la ciudad.
Sobre el ofrecimiento inicial del municipio para conseguirles un espacio donde éstos demandan y posterior negativa por la falta de recursos, el entrevistado dijo que no todo se puede resolver con dinero o terrenos, sino incluso haciendo un llamado a los líderes de tales movimientos para que dejen de provocar un problema a la sociedad.