Carisma y valentía son dos de las palabras que mejor definían a Valente, quien con apenas 20 años de edad fue capaz de “arrastrar” a la afición hacia los ruedos, de provocar la pasión por la fiesta brava, y que lejos de ella perdiera la vida: En su motocicleta, otra de sus grandes pasiones. Nació un 4 de agosto de 1964 y murió un 30 de agosto de 1984.
Cuentan que en una ocasión, fue a recoger a un novillero a un hotel, y una viejecita llegó buscando a un mozo para que le cambiara unos focos en su casa, el joven se ofreció y ella, sin saber de quién se trataba, aceptó la ayuda; días después que él salió en televisión, la señora se dio cuenta que era un personaje famoso. Cuando Valente falleció, ella estaba desconsolada diciendo ‘Mejor me hubiera muerto yo, él era tan sencillo y buena gente’. A 17 años de su muerte, la Temporada Novilleril 2002 llevó el nombre de “Valente Arellano”.