MATAMOROS, COAH.- Los vendedores no quieren utilizar el mandil y el gorro como parte de las medidas de higiene que determinó la Dirección de los Servicios Públicos Municipales y la Secretaría de Salud en el municipio de Matamoros.
El comerciante dedicado a la venta informal Alfonso Pérez Ríos, dijo que no quiere utilizar el mandil y el gorro, incluso con aliento alcohólico, muy molesto, dijo que no tiene por qué atender las recomendaciones que le hace su líder.
Alfonso pertenece a de la Unión de Vendedores Ambulantes, Fijos y Semi-Fijos, "Maclovio Herrera''.
Molesto por lo sucedido, Arcadio Gómez dijo que la agrupación tiene 23 personas que la integran, todos son vendedores ambulantes, personas de bien y trabajadoras, todos quieren cumplir con lo que marca la Ley, luego que los más mínimos preceptos, de lo que es un derecho y una obligación, dijo que se tienen que cumplir.
Por tal motivo, al no darle Alfonso una razón suficiente y válida para no cumplir con las mínimas reglas de higiene para vender fruta y alimentos, buscó al dueño del carrito ambulante, Refugio Nájera García, quien le renta o presta el carrito a Alfonso, que es su yerno, para que se dedique a la venta informal.
La Unión de Vendedores Ambulantes “Maclovio Herrera”, dijo Arcadio Gómez, es una de las agrupaciones que tratan de cumplir con todo lo que les indican las autoridades municipales.
Pertenecen a la Confederación Nacional de Organizaciones Populares (CNOP) y si los Servicios Públicos Municipales les exigen mandil, lo portan, el gorro y el cabello recogido lo hacen, están al corriente del pago fiscal, cinco pesos por semana, el pago de la licencia municipal, 40 pesos al año, tarjeta de salud y por inscribirse en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.