TORREÓN, COAH.- Las horas pico son las peores: los peatones lo mismo “torean” los automóviles que corren de una esquina a otra para ponerse a salvo. No falta quién se quede a la mitad del camino y entonces hay que encomendarse a todos los santos para que algún conductor se anime a ceder el paso.
Y es que con las modificaciones viales realizadas en algunas arterias de la ciudad, el respeto a los espacios reservados para los peatones se perdió por completo, a los conductores siempre les importa más llegar a tiempo a su destino.
Mientras el Departamento de Ingeniería de Tránsito asegura que en las modificaciones viales realizadas en las arterias de la ciudad se tomó en cuenta la seguridad del peatón, los transeúntes deben realizar todo tipo de maniobras para evitar ser atropellados.
Enrique Rodríguez Martínez, jefe del Departamento de Ingeniería de Tránsito, señaló que los cambios de vialidades más importantes realizados en el 2002 son: los flujos continuos de semaforización instalados en la Ramón Corona, Comonfort y Leona Vicario, el recorte del camellón lateral del bulevar Independencia y Ávila Camacho, así como las modificaciones en el crucero conformado por la avenida Juárez y calzada Cuauhtémoc.
“La semaforización se hizo para agilizar la circulación y darle protección a los peatones, hay que recordar que los cruces peatonales son en las esquinas a través de los sistemas de semaforización, se tienen pintadas en color amarillo y en diagonal sobre el pavimento áreas reservadas como son los pasos cebra o en su caso señales de alto”.
Los cambios viales en Cuauhtémoc y la avenida Juárez, dijo, eran necesarios porque había un serio problema de congestionamiento a consecuencia de la reducción de carriles, pues no había una forma directa de cruzar toda la calzada de Oriente a Poniente.
En este caso, dijo, también hay líneas de peatones y pasos cebras, además la semaforización permite cruzar en luz roja, para eso hay aproximadamente unos 40 segundos en la Cuauhtémoc y otros 35 segundos en la Juárez, tiempo suficiente para que los transeúntes puedan trasladarse de una esquina a otra sin peligro, siempre y cuando los conductores no invadan las áreas de reserva para los transeúntes.
“El lado más difícil para poder cruzar es sobre la calzada Cuauhtémoc del lado norte pegado a lo que es el bosque Venustiano Carranza, debido a que existe una vuelta continua de la Juárez hacia la calzada, es decir, de Oriente a Norte”.
La recomendación para el peatón, dijo, es cruzar en forma de escuadra el crucero: del bosque a la Guardería y de aquí hacia la acera del lado poniente de la calzada, siempre tomando en cuenta las respectivas fases de rojo para garantizar la seguridad, es lo más recomendable.
Enrique Rodríguez Martínez dijo que en el bulevar Independencia se creó un camellón central virtual con dos funciones específicas: una para darle al peatón un lugar de resguardo mientras cruza, otra para establecer un carril de vuelta a izquierda para los automovilistas.
“En el bulevar Independencia y Ávila Camacho se recortó el camellón lateral, fueron como 80 metros, para poder crear una área más amplia de carriles y poder desfogar el tráfico vehicular, este crucero estaba saturado y requería de ese espacio”.
Respecto al peatón en este punto conflictivo vehicular, dijo Rodríguez Martínez, tiene una fase de rojo para poder cruzar de un lado a otro. “Sí es riesgoso para las personas cruzar a mitad de calle, lo más recomendable es hacerlo en la esquina cuando el semáforo lo permita”, reconoció.
Para la seguridad del peatón, agregó, también existe el camellón central virtual que está protegido por boyas y le permite a las personas hacer una parada intermedia para luego proseguir su camino.
“No nos hemos olvidado del peatón pero siempre existe la posibilidad y el riesgo de accidentes, es necesario que las personas tomen sus medidas de seguridad y que crucen por los lugares indicados, por eso siempre debe ser en las esquinas”.